Condenados a pagar 60 millones a la familia de un obrero que murió en una obra

La Audiencia de Sevilla ha condenado a dos encargados de obra a un mes de arresto y a pagar 60 millones de pesetas de indemnización a la familia de un trabajador que falleció sepultado por una zanja de 2,60 metros en las obras de canalización de fibra óptica entre Sevilla y Osuna. El accidente ocurrió el 23 de marzo de 1990 en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), cuando el obrero M. M. G., de 25 años, falleció sepultado por una zanja que no había sido apuntalada como medida de seguridad. La Sección Primera de la Audiencia de Sevilla, en una sentencia confirma en todos sus extremos el veredicto anterior de un juzgado penal, que condenó a J. A. S. J., representante de la empresa Alcatel como contratante de la canalización de fibra óptica, y a M. L. R., como encargado de Proycase, compañía que ejecutó los trabajos, por un delito de imprudencia con resultado de muerte.