Una banda intenta asaltar un furgón en Alicante a balazos y con explosivos

El espectacular asalto, que acabó sin heridos, provocó un gran revuelo en el polígono de Rabasa, donde Prosegur tiene su nave central en Alicante. Según fuentes policiales, la habilidad del conductor de la empresa, que viajaba junto a dos vigilantes jurado, le permitió esquivar las dos furgonetas, entre una lluvia de tiros, e introducirse de nuevo en la nave.

El vehículo acorazado custodiaba una suma "importante" de dinero, según la empresa, y se disponía a empezar el reparto, sobre las ocho de la mañana, cuando dos furgonetas salieron a su paso.

Al menos cuatro hombres de complexión fuerte, con las caras tapadas y ataviados con monos de trabajo, efectuaron "más de 200 tiros", según el conductor, contra la luna del furgón blindado. Tras poner unos calzos en las ruedas posteriores para inmovilizar al furgón, los asaltantes colocaron un explosivo en los bajos del vehículo. El artefacto estalló, pero no logró reventar el furgón, según declaró el presidente del comité de empresa de Prosegur, Francisco González.

Eliminar huellas

Con gran pericia, el conductor embistió a las furgonetas de los atracadores y logró eludir el cerco. Para eliminar huellas, los ladrones incendiaron una de estas furgonetas, abandonaron la otra y huyeron en un tercer vehículo, un Opel Vectra. Un vecino de la barriada alicantina de Villafranqueza, a unos dos kilómetros del lugar del suceso, alertó minutos más tarde de la presencia de un vehículo en llamas, que resultó ser el Opel de los atracadores. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Alicante apuntaron que lo más probable es que la banda huyera por la autopista A-7.

La acción violenta cometida en Alicante es la tercera contra un furgón de seguridad en la Comunidad Valenciana en tres meses. Existen muchos elementos coincidentes entre los asaltos y, a pesar de que el objetivo no haya sido alcanzado en ninguno de ellos, los golpes se han ido perfeccionando y sofisticando. Por ello, la policía sostiene que se trata de una banda organizada cuyos componentes proceden de algún país europeo, posiblemente Italia, y demuestran una gran preparación, lo que indica que ya han llevado a cabo acciones de este tipo en otros lugares.

En los tres atracos frustrados contra furgones blindados -el primero contra la empresa Securitas el 12 de marzo en la localidad valenciana de Quart de Poblet, y los dos últimos contra Prosegur, el 4 de junio en Xirivella (Valencia), y ayer en Alicante- los asaltantes llevaban pasamontañas, vestían con monos, portaban armas largas y se calcula que actuaron al menos cuatro asaltantes.

La primera de las acciones fue una operación de cerco a un furgón con tres vehículos. De ellos, dos fueron abandonados y posteriormente se certificó que habían sido robados en días previos. En Xirivella, los delincuentes colocaron un explosivo en una papelera para distraer la atención de los vigilantes del centro comercial al que acudió el furgón blindado. Ayer, los sospechosos también usaron explosivo, pero esta vez lo adosaron a la puerta del furgón para reventarla y acceder al botín.