Los ex comunistas optan a la alcaldía de Berlín a los 12 años de caer el Muro

Gregor Gysi, el más conocido de los líderes del Partido del Socialismo Democrático (PDS), sucesor del régimen comunista de la República Democrática Alemana (RDA), se postuló ayer como candidato a la alcaldía de la capital alemana, donde una severa crisis financiera ha barrido a los conservadores del poder.

De verbo fácil y gran habilidad política, Gysi tiene una posibilidad real de guiar hasta el Ayuntamiento a los ex comunistas, 40 años después de la construcción del Muro de Berlín y ya casi doce después de su caída.

Según algunos sondeos, más de un 50% de los ciudadanos de la capital, de 3,5 millones de habitantes, pueden imaginar como futuro alcalde a este abogado de 53 años, quien a lo largo de los años noventa ha intentado transformar al PDS de una agrupación de cuadros del antiguo régimen en un partido socialista moderno, que a la vez de tomar distancias con la dictadura comunista, sigue defendiendo la identidad perdida de los alemanes del Este. En las últimas elecciones en la ciudad Estado de Berlín, en 1999, el PDS consiguió un 17,7% de los votos, un resultado que el liderazgo de Gysi podría incrementar sustancialmente.

La Unión Cristiana Democrática (CDU), entretanto, hasta la tarde de ayer estudió la posibilidad de lanzar al ruedo político de la capital a su ex presidente Wolfgang Schäuble, otro peso pesado de la política alemana. Al final de la tarde, sin embargo, los conservadores comunicaron que su candidato será el político local Frank Steffel, de apenas 35 años. Aunque Steffel adelantó ayer que no basará su campaña en el anticomunismo, es evidente que los conservadores se proponen recordar continuamente los orígenes totalitarios del PDS, que despiertan mucho resquemor también en algunos sectores de la socialdemocracia.

Toneladas de difamaciones

Previendo 'toneladas de difamaciones', Gysi formuló ayer una primera condena a la construcción del Muro de Berlín. Este tipo de pronunciamientos posiblemente convenza también a los socialdemócratas, quienes hasta ahora no han querido excluir una alianza con el PDS. Su candidato, Klaus Wowereit, dirigirá el gobierno municipal transitorio hasta la convocatoria de nuevas elecciones, probablemente en septiembre.

Tras diez años ininterrumpidos de gobernar en la capital alemana, los conservadores habían perdido el poder el sábado tras una moción de censura apoyada por los socialdemócratas, los verdes y los ex comunistas.