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AUTOMOVILISMO

Una avería arruina a Sainz a sólo 30 kilómetros del final del Rally Acrópolis

Carlos Sainz (Ford) se quedó ayer a tan sólo 30 kilómetros de su posible victoria en el Rally Acrópolis y del seguro liderato en el Campeonato del Mundo. Otra vez la mala fortuna, en forma de avería, apartó al español del éxito cuando había afrontado el último tramo de la carrera griega con apenas cinco segundos de desventaja respecto a su compañero de equipo, el escocés Colin McRae, que ganó finalmente y se colocó al frente de la clasificación general de la competición.

El primer abandono de la temporada le llegó a Sainz en el momento más inesperado y de modo doloroso. Tras un recorrido sin falta a lo largo de tres duras etapas por los pedregales griegos, se quedó sin recoger el fruto de su perfecta estrategia por culpa de un problema con la presión del aceite. 'Ha sido una terrible decepción porque tengo el convencimiento de que podía ganar', dijo el madrileño, que ahora se queda el tercero en el Mundial, a cuatro puntos de McRae y del finlandés Tommi Makinen, que se clasificó el cuarto, a 2m 15s, del vencedor.

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'Ahora hay que pensar en positivo y con vistas al futuro y ver que es posible recuperar el terreno perdido aquí', añadió Sainz, cuya próxima oportunidad será la octava carrera de la temporada, el Rally Safari, del 19 al 22 de julio. Los Ford, claros dominadores en el Acrópolis volverán a ser los favoritos, teniendo en cuenta las duras características de la cita africana.

Tanto Sainz como McRae se mostraron superiores a todos sus competidores. En la última etapa tan sólo el inglés Richard Burns (Subaru) les podía hacer sombra, pero también tuvo que retirarse; en su caso, por una avería en la transmisión en el penúltimo tramo.

Entonces, sin órdenes desde la dirección del equipo, Sainz y McRae se jugaron el triunfo en la última cronometrada. Al español le salió cruz y el escocés obtuvo el cuarto triunfo de su historial con 49 segundos de ventaja sobre el noruego Petter Sollberg (Subaru) y 1m 35s sobre el finlandés Harri Rovanpera (Peugeot).

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