Pujol asegura que Convergència no aspira en ningún caso a lograr la independencia de Cataluña

En un momento en que los sectores más soberanistas de su partido, Convergència Democràtica, exigen a Pujol un guiño a ERC tras el serio deterioro que han sufrido las relaciones entre ambos partidos, ayer el presidente catalán, lejos de apaciguar los ánimos, echó más leña al fuego. En su primer día de viaje oficial a Finlandia, que le llevará después a las repúblicas bálticas de Estonia y Letonia, Pujol declara en una entrevista: 'CiU no quiere la independencia de Cataluña porque tenemos vínculos muy fuertes con España en economía y en relaciones personales'. Y lo ejemplifica en la composición social del área metropolitana de Barcelona donde, declara, los antepasados de parte de la población proceden de otras regiones de España.

Preguntado sobre el apoyo entre la población catalana de los sentimientos separatistas, el presidente de la Generalitat reconoce su existencia aunque matiza que es minoritaria y que no 'tiene fuerza política', menospreciando así el peso social y político de Esquerra Republicana, el único partido parlamentario que, con sus 12 diputados y capaz de articular con CiU otra mayoría diferente a la del PP, defiende esta opción para Cataluña.

Una vez más, Pujol ha hecho oídos sordos al ala más nacionalista de CiU, que le viene reclamando un cambio de rumbo en la estrategia de alianzas en el Parlamento catalán, demasiado subordinada, dicen, al Partido Popular. El presidente de la Generalitat alerta sobre la voluntad del Gobierno central del PP que, con su mayoría absoluta, intenta limitar las competencias de la Generalitat con leyes como la de puertos o la de estabilidad presupuestaria. 'Nuestra lengua y nuestra cultura ya no están perseguidas, ni tampoco nuestros signos de identidad. Pero las leyes generales continúan restringiendo nuestras competencias. Nos sucede continuamente y lo queremos evitar', afirma. En este sentido se refiere a las negociaciones sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, y declara que Cataluña no tiene los mismos derechos que el País Vasco: 'Por razones históricas esta autonomía es más amplia'.

Pujol repite en la entrevista su teoría de que con una interpretación más amplia de la Constitución, Cataluña podría obtener más autonomía, aunque descarta obtenerla en la actual legislatura. 'Ahora no parece posible', añade, por la mayoría absoluta de Madrid.

Sobre los motivos de su visita a Filandia, el presidente de la Generalitat admite su afecto por este país escandinavo 'que ha sido capaz de defender su identidad y ha conseguido éxitos económicos, culturales y en el ámbito internacional'. Asimismo, manifiesta su interés por el proceso de bilingüismo oficial. Finlandia, al contrario de lo que sucede en Letonia, ha aplicado una política modélica en cuanto a integración de las minorías. En este país, de cinco millones de habitantes, cerca de 300.000 personas son de origen sueco y tienen este idioma como lengua materna. La legislación reconoce esta excepcionalidad hasta el punto de que los municipios pueden ser declarados monolingües o bilingües según la composición social de sus ciudadanos.

La visita oficial de Jordi Pujol a Finlandia, Estonia y Letonia se prolongará hasta el próximo viernes.