Un amante de la poesía que seguía fielmente los pasos de su padre

'El príncipe heredero era brillante, sensible y agradable. Lo encuentro increíble', explica Mana Ranjan Josse, un periodista nepalí que escribe sobre la familia real. No es fácil entender que un joven heredero mate a la mayor parte de sus familiares directos en un momento de locura. Y sorprende más porque, hasta la noche del viernes, ese joven príncipe, Dipendra, había seguido fielmente la senda paterna.

Compartía con su progenitor la afición por la poesía y, tras estudiar, como hizo él, en el prestigioso centro de Eton (Reino Unido), volvió a Katmandú y se especializó en geografía. Dipendra se enroló entonces en la Academia Militar Real de Nepal, donde, como su padre, obtuvo la licencia de piloto de helicóptero. Incluso colaboró en el Gobierno del país en 1992 como responsable del Consejo de Deportes. Se sospecha que, cuando su padre se opuso a sus planes de matrimonio, todo acuerdo entre ambos se vino abajo. Queda el interrogante de la tragedia: la identidad de la supuesta novia.