El último de la Quinta

Casi 18 años después de que el actual presidente de honor del Madrid, Alfredo di Stéfano, por entonces entrenador, decidiera darle una oportunidad a aquel chaval de pelo ensortijado, algo desaliñado en su vestimenta, en Murcia -con el 7 a la espalda y con gol incluido-, la Quinta del Buitre conquistó ayer su octava Liga, la última de una generación histórica. Lo hizo gracias a su único superviviente, Manuel Sanchis, madrileño de 36 años, que ha pasado la mitad de su vida con el escudo del primer equipo grabado en el pecho.

Sanchis vivió ayer la fiesta desde la grada, como un aficionado más, junto al resto de jugadores no convocados. A partir del 30 de junio, el Madrid tendrá que acostumbrarse a vivir sin el que ha sido su capitán en la última década, un futbolista que tiene en su poder más títulos que ningún otro jugador español en activo.

Amén de las ocho Ligas conquistadas, Sanchis se ha adueñado con la camiseta del Madrid -la única que ha vestido, selección aparte- de dos Ligas de Campeones, una Copa Intercontinental, dos Copas de la UEFA, dos Copas del Rey, cuatro Supercopas de España y una Copa de la Liga. Puesto a pasar a la historia, Sanchis es el jugador que más partidos de Liga ha disputado (522), en los que ha conseguido 33 goles. Le contemplan también 100 partidos de torneos europeos y 48 con la selección.

La despedida de Sanchis, sin embargo, tendrá que esperar. Se producirá en la última jornada de Liga, frente al Valladolid, en el que el público le rendirá homenaje, por mucho que él se haya negado a protagonizar un acto de ese tipo. El Madrid intentará que la federación le entregue el trofeo en ese partido. Si así ocurre, Sanchis será quien lo recoge.

Ayer, aunque fuera desde la grada, Sanchis volvió a abrazar la gloria, algo habitual desde que el 4 de diciembre de 1983 comenzara a escribir una página de oro que ha sido fiel a uno de sus lemas favoritos: 'La vida no está hecha para los segundos'.