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Vecinos de Caños de Meca acusan al Ayuntamiento de dejación

La asociación de vecinos de Caños de Meca, una franja litoral situada en la localidad de Barbate (Cádiz), denunció ayer las carencias de equipamientos, infraestructuras y servicios que padecen. De esta situación culpan al gobierno local, del PP, al que acusan de 'desidia'.

Los 1.200 residentes en esta zona, que cuadriplica su población en verano, acusaron al alcalde, Juan Manuel de Jesús, de convertir esta zona en 'el basurero' del sur de España por consentir, entre otras cosas, 'la insalubridad en el alcantarillado y el agua, las acampadas ilegales, los aparcamientos prohibidos, la venta ambulante ilegal, el nudismo, la práctica de sexo y la venta de droga'.

En varias cartas remitidas a responsables de los Gobiernos central y autonómico, el presidente de la asociación vecinal, Alonso Sotelo, enumera las carencias que sufre la población de Caños de Meca. También conmina a estos altos responsables de las distintas administraciones a 'ayudar y presionar' al alcalde barbateño para activar un plan de choque urgente que 'ponga fin' a lo que calificó de 'caótica y grave situación'.

'Epidemias y ratas'

Según denuncian los vecinos, tienen que soportar la falta de agua potable y alcantarillado. Sotelo detalla que esto provoca la acumulación de basuras, heces y enseres que no son recogidos por los servicios del Consistorio. A juicio del representante vecinal, la situación 'causa un potencial riesgo sanitario de epidemias, olores fétidos, ratas fácilmente visibles y la presencia de perros y gatos abandonados'. Los residentes solicitan una inspección sanitaria.

Asimismo, denuncian la proliferación de acampadas ilegales por parte de personas a las que califican de 'vagabundos, pedigüeños, indocumentados y drogadictos'.

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El presidente de la asociación vecinal informó ayer de que las cartas enviadas han sido remitidas al alcalde, al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves; al vicepresidente económico del Gobierno, Rodrigo Rato; al ex ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja; al consejero de Salud, Francisco Vallejo; al director general del SAS, Juan Carlos Castro, y al diputado nacional del PP por Cádiz Jesús Mancha.

Por otra parte, el antiguo poblado de pescadores de Sancti Petri, situado en la desembocadura del caño del mismo nombre en Chiclana de la Frontera (Cádiz), dejará de estar en desuso en breve. La Comisión de Medio Ambiente del Congreso de los Diputados aprobó ayer por unanimidad que la titularidad de este enclave de alto valor paisajístico y medioambiental pase a la Junta. Con este trámite, se desbloquea un histórico proyecto del Ayuntamiento chiclanero para dar uso público a unos terrenos donde desarrolló su actividad el Consorcio Nacional Almadrabero hasta los sesenta.

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