El PP retira la reprobación a Perelló, a quien descalificó durante meses por 'insultar' a Miró
La oposición tacha de 'circo' la iniciativa de los populares y dice que han hecho el 'ridículo'
Al final todo quedó en agua de borrajas. El PP retiró ayer su propuesta de reprobación al diputado socialista Andrés Perelló, al que pretendía condenar por su 'actitud irrespetuosa e insultante' hacia la presidenta de las Cortes Valencianas, Marcela Miró, a la que llamó 'tontita'. Los populares, que durante los dos últimos meses han cargado duramente contra Perelló, alegaron que ya habían conseguido su objetivo de 'desenmascarar' el talante del portavoz adjunto socialista y de 'poner en el escaparate la incoherencia' de las diputadas del PSPV. Los grupos de la oposición achacaron la decisión del PP a que había tomado conciencia de su actuación 'ridícula' en este caso, que calificaron de 'circo'.
Un comentario privado al término de una comisión ha estado a punto de costarle caro a Perelló. 'Parecía tontita cuando la compramos y mira cómo nos ha salido'. Estas palabras, referidas a Marcela Miró, las pronunció el diputado socialista el 14 de marzo al término de la comisión de Peticiones en la que el PP forzó un dictamen contrario a la actuación de la entonces adjunta al Síndic de Greuges Emilia Caballero violentando el Reglamento de la Cámara, sin respetar los plazos previstos, para lo que gozó del apoyo de la presidenta de las Cortes, quien denegó el debate de la propuesta e incluso impidió el turno de explicación de voto. Por todo ello, Perelló elevó su protesta en la sesión y después hizo el citado comentario.
Los dos grupos de la oposición anunciaron la posibilidad de recurrir al amparo del Tribunal Constitucional. El PP reaccionó con un ataque a Perelló por sus 'insultos' a Miró y anunció su intención de 'reprobarle' en la comisión de la Mujer, para lo cual requirió a Canal 9 una copia del vídeo con las palabras del diputado socialista. Incluso hablaron de las posibles consecuencias: suspensión de empleo y sueldo. El vídeo fue visionado ayer en la comisión. El polémico comentario de Perelló produjo hilaridad entre los representantes socialistas y alguna de las diputadas populares también tuvo que aguantar la risa. Pero detrás venía otro corte con declaraciones del diputado en las que éste hablaba de 'conculcación de derechos' y 'persecución al discrepante' por parte del PP, y en las que reconocía tener 'miedo' por el uso partidista de las Cortes por parte del partido que sustenta al Consell. Unas declaraciones que Canal 9 no emitió en su día y que la presidenta de la comisión, la popular María José García, se apresuró a cortar porque su difusión no interesaba en absoluto a los populares.
En el debate, la portavoz de EU, Dolors Pérez consideró que con la iniciativa los populares daban 'un paso más para acabar de denigrar a las Cortes', les acusó de imponer una 'dictadura velada' en la que amenazan con la reprobación a todo aquel que disiente y pidió su retirada porque, dijo, 'no tiene ningún sentido'.
Una petición a la que se sumó la portavoz socialista, Carmen Ninet, quien lamentó que las diputadas del PP se prestaran al 'juego' montado por su partido, que intenta 'convertir a los miembros de la comisión de la Mujer en extras de su mayoría absoluta y a esta sesión de hoy [por ayer] en una parodia de comisión con el capítulo final escrito de antemano, que es la condena a un miembro de esta Cámara simplemente por pensar diferente'. 'No cabe una utilización más perversa de la comisión de la Mujer', dijo Ninet, que calificó de 'inquisitorial' la iniciativa de los populares, a los que 'la intolerancia se les sale por las costuras de su traje de centro'.
Esther Franco, portavoz popular, dijo que la iniciativa no era un 'capricho', sino que respondía a unas 'manifestaciones vejatorias y de menosprecio a la mujer' y aseguró que el PP 'ha ido tan lejos' como Perelló 'ha querido', porque 'la cortesía parlamentaria lleva a pedir disculpas'. Perelló, añadió, 'no puede pretender disfrazarse de mártir de la libertad de expresión, aquí no hay mártir ni persecución, sino la búsqueda de un ambiente parlamentario más respirable'. Finalmente, anunció la decisión de retirar la iniciativa -que Presidencia de la Generalitat impuso mediante llamada al Grupo Popular a última hora del lunes, según fuentes populares-, al ver cumplidos sus objetivos: llevar el caso 'al foro adecuado', 'desenmascarar' a Perelló, y 'poner en el escaparate' la incoherencia de los socialistas. Éstos dijeron que el PP ha hecho 'el ridículo'.
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