El BBVA rompe la fusión de Uno-e con First-e tras comprobar la falta de rentabilidad del proyecto

El banco por Internet del BBVA, Uno-e, ha roto la alianza que suscribió hace un año con la entidad con sede en Dublín First-e y que contemplaba la creación de un grupo financiero online que se expandiría por Latinoamérica, Europa, Asia y Estados Unidos. Aunque ya se venía fraguando (véase EL PAÍS de 7 de abril), ésta es la prmera decisión importante que se anuncia desde que se renovó la cúpula directiva a principios de abril.

Los negocios en Internet se modifican con rapidez y la prueba es que el BBVA presentó este plan con ambiciosas intenciones que hoy han quedado seriamente cercenadas. La entidad española justifica la ruptura en que 'la banca por Internet en Europa no está respondiendo con la rapidez prevista y la rentabilidad que ofrece no es la esperada', según fuentes del banco, y recuerda los casos de ComDirect, Self Trade y Money Self, todos ellos retirados o reducidos en sus planteamientos iniciales.

En febrero de 2000, cuando se presentó el plan, Uno-e (participado en un 51% por el BBVA y un 49% por Terra, filial de Telefónica en la Red), estaban dispuestos a pagar 116.000 millones de pesetas por el control de Uno-First.

A los seis meses, el BBVA rebajó en un 33% esta valoración y ayer anunció oficialmente una ruptura ya esperada en el mercado. Uno-e, un proyecto nacido en Argentaria antes de la fusión con el BBV, no siempre se ha visto con gran entusiasmo en el banco fusionado.

A partir de ahora, Uno-e se centrará en España y en Brasil, aunque no se descarta su promoción en México. El banco ha optado por reducir gastos y concentrarse en los mercados donde tiene oficinas y la Red se desarrolla con fuerza.

El BBVA reconoce que esta ruptura le supondrá una pérdida neta de 8.300 millones de pesetas (50 millones de euros) procedente de un préstamo concedido a Firt-e. Terra tendrá una pérdida similar ya que sufragó un préstamo de igual importe.