Sant Jordi descubre la rambla del Raval

El próximo lunes, Sant Jordi descubrirá que Barcelona tiene más de una rambla: por supuesto, la de siempre, la que discurre entre el mar y la plaza de Catalunya, la que se llena de tenderetes, de libros, la de las floristas y paseantes. Pero hay, a su lado, una segunda rambla, más joven, menos frecuentada, pero con las mismas ansias de vida: la rambla de Raval, que el lunes recibirá la festividad de Sant Jordi con un jolgorio completo.

Ese día será difícil, por no decir imposible, que las estatuas humanas que habitualmente pueblan la rambla más paseada se instalen entre los tenderetes y la multitud. Pero no se irán al paro: las acogerá la rambla del Raval, y así lo ha organizado la asociación cívica Raval és, formada por restauradores y hoteleros, músicos, pintores y otros artistas e intelectuales, con el apoyo final del propio distrito de Ciutat Vella.

El lunes, los miles de personas que acudan a patear la rambla de los libros y las flores podrán acercarse también a la vecina del Raval, empleando para ello un trenecillo cuyo recorrido final aún no está definido, pero que irá de una a otra vía: el objetivo es permeabilizar la zona, acercar la nueva rambla a la ciudad por la vía de llevar a los ciudadanos hasta ella para que comprueben que la característica del barrio y de sus calles es la integración y la convivencia.

En total habrá unas 35 estatuas humanas en la nueva rambla, acompañadas por una banda municipal y otras atracciones para niños y mayores. Los mimos participarán en un concursos en el que podrá votar quien quiera para elegir la mejor estatua, el mejor vestuario, la estática más lograda y la respuesta más adecuada al tintinear de las monedas. Los votantes también podrán lograr un premio: un día en el Raval, incluyendo comida y cena, paseo y espectáculo. Lo del paseo es muy importante: se trata de explicar que allí hay una iglesia románica (Sant Pau del Camp) edificios góticos, barrocos y modernistas. En total, tres parejas serán las agraciadas. Las urnas estarán abiertas durante el periodo de actuación: entre las 11.30 y las 14.00 y desde las 17.00 hasta las 19.00. Pero el remate final será a las ocho de la noche: la gran fiesta popular.

Ésta es la segunda actuación pública de la asociación, cuyo objetivo es promover el barrio entre los ciudadanos. La primera fue un concurso de puntaires celebrado el pasado día de Santa Eulàlia. Hasta 375 personas se reunieron en la rambla del Raval para hacer encajes de bolillos.