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Fuerteventura se queja por la llegada de 105 inmigrantes

La comisión especial de Inmigración del Cabildo de Fuerteventura mostró ayer su 'rechazo unánime y contundente y la protesta más enérgica' de todos los grupos con representación en la institución (CC, PSC-PSOE, IF y PP) por la decisión de trasladar a 105 inmigrantes desde Tenerife a la antigua terminal del aeropuerto de Fuerteventura.

Según los grupos, estas instalaciones 'no son un centro de acogida y sólo reúnen las condiciones propias de cualquier centro cerrado, con unas duchas y colchonetas habilitadas, tal y como puede hacerse en cualquier lugar en un recinto de similares características, como un pabellón deportivo'.

La comisión, a la que asistió a petición propia el responsable insular de la Delegación del Gobierno en Canarias, considera que las antiguas salas de estancia del aeropuerto 'no cuentan con las mínimas condiciones higiénicas y sanitarias para acoger un número de personas tan importante', y recuerda la denuncia realizada en este sentido por la propia Fiscalía de Extranjería del Tribunal Superior de Justicia de Canarias en su memoria del año 2000.

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Unos 250 inmigrantes de Argelia, Irak y Cachemira que viven en chabolas denunciaron ayer que se les mantiene desde hace meses en una situación inhumana, sin comida ni agua, pese a que tras los últimos traslados a la Península hay plazas libres en el Centro de Estancia Temporal (CETI).

Los inmigrantes que viven en las chabolas denunciaron que carecen de agua, inodoros y duchas y que comen 'lo que encontramos en las basuras', lo que hace que muchos estén enfermos. Tras soportar el frío y la lluvia del invierno, las altas temperaturas registradas en Melilla desde que entró la primavera hacen que el calor en las barracas de plástico sea 'totalmente insoportable'. Algunos llevan diez meses en la ciudad sin que les hayan notificado si se ha resuelto su petición de asilo ni si tienen posibilidades de obtener permiso de residencia y trabajo.

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