Un informe de Educación detecta un creciente fracaso escolar en la UPV

El estado de salud de la Universidad del País Vasco (UPV-EUE) es satisfactorio, pero presenta dos aspectos preocupantes. Uno es el creciente fracaso escolar, que cobra especial relevancia en titulaciones como Ingeniería Industrial, Arquitectura, Medicina o Ciencias Económicas y Empresariales, y que reclama actuaciones para lograr su atenuación. El otro es una oferta de titulaciones 'excesivamente rígida', que es necesario flexibilizar.

Esta son las conclusiones más críticas que se recogen en el Diagnóstico del sistema público universitario vasco, un amplio estudio elaborado por 11 expertos por encargo del Departamento de Educación y que fue presentado ayer en Bilbao por uno de sus responsables, el ex rector de la UPV Juan José Goiriena, y el consejero Inaxio Oliveri. Si bien el informe no ofrece las cifras del fracaso escolar, Goiriena recalcó que 'es uno de los grandes problemas de la universidad. Una gestión menos burocratizada, el fin del estancamiento existente en los estudios de tercer ciclo (doctorados y cursos de posgrado), la instauración de una política de recursos humanos y un mayor papel de la universidad en la Investigación y Desarrollo (I+D) en Euskadi son algunas de las recomendaciones que aparecen en las 450 páginas del estudio.

También los aspectos positivos de la UPV tienen cabida en este análisis. De hecho, sus redactores destacan que, pese a su juventud, la universidad pública se ha consolidado como institución 'madura'. Por su parte, Oliveri insistió en la necesidad de una reforma consensuada de la Ley Universitaria para poder llevar a buen término los consejos expuestos en el diagnóstico.