Aznar exige a la patronal vasca una respuesta activa frente a ETA

Aznar clausuró en el Palacio Euskalduna de Bilbao una conferencia de la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) a la que acudió la élite empresarial vasca. Entre el medio millar de empresarios figuraban Román Knörr, presidente de la patronal vasca; José María Vizcaíno, presidente del Círculo de Empresarios Vascos; Iñigo Oriol, máximo responsable de Iberdrola, y Francisco González, copresidente del BBVA. También acudieron los presidentes de las comunidades autónomas limítrofes y la cúpula del PP vasco con su candidato a lehendakari, Jaime Mayor, al frente.

Pese a estar invitado por la APD, no acudió el lehendakari Juan José Ibarretxe, quien, sin embargo, clausuró un acto de las sociedades anónimas laborales vascas en otra dependencia del mismo recinto y a la misma hora. Ibarretxe justificó su ausencia en que las jornadas tenían un contenido electoral. Vizcaíno dijo que el Gobierno vasco y el PNV han presionado a la APD para que los empresarios no acudan a las mismas.

Aznar aprovechó la presencia de la élite empresarial vasca para alertarles sobre el riesgo por el que atraviesa la democracia en Euskadi. 'Lo que está en juego no es la prevalencia de una u otra opción política ni de uno u otro modelo empresarial, sino las condiciones previas que en una sociedad democrática hacen posible que las opciones políticas se contrasten libremente en las instituciones y en la sociedad', dijo.

El presidente precisó el riesgo en 'una realidad de violencia terrorista, de presión ambiental, de coacción, de chantaje', cuya expresión es 'una realidad de quiebra de los consensos sociales y políticos básicos, de erosión contra el marco de convivencia ampliamente apoyado por la sociedad vasca'. Llamó a los empresarios de la comunidad autónoma a vencer el miedo 'con la movilización social, la concentración de las energías cívicas para que los que retrocedan sean los que amenazan el futuro de paz' de Euskadi.

Aznar se comprometió a defender el Concierto Económico, de inminente negociación. Responsabilizó de los recelos existentes en las instituciones europeas y en el resto de España sobre los privilegios del Concierto a la gestión que de él ha hecho el Gobierno vasco del PNV y EA. Según Aznar, la 'manipulación' que el Gobierno vasco hace del Concierto se expresa en su pretensión de que 'el marco jurídico político es un menú a la carta o una herencia que se acepta a beneficio de inventario'.