Otegi culpa a los peneuvistas de alentar una escisión en EH y minimiza su alcance

El portavoz de EH, Arnaldo Otegi, intentó ayer atajar la impresión de que una ruptura está a punto de producirse en el seno de su formación, tras el ultimátum de los críticos de la corriente Aralar, que ayer celebraron una reunión y darán a conocer su decisión el lunes. Otegi advirtió de que quienes desde dentro de EH (los propios críticos dirigidos por Paxti Zabaleta) 'y algunos desde fuera', en alusión al PNV, buscan una escisión 'no lo lograrán'. En todo caso, admitió la posibilidad de que se produzca al decir que en todo caso su alcance será muy limitado.

Otegi hizo hincapié en asegurar que la izquierda abertzale acudirá a las elecciones vascas como 'una oferta única'. El dirigente radical apuntó a 'algunos medios de comunicación' y 'a los sectores más reaccionarios del PNV', con una mención expresa al presidente del Parlamento vasco, Juan María Atutxa, de alentar una estrategia de ruptura en sus filas, según él condenada al fracaso. La constatación de que miembros de la corriente Aralar visitan regularmente la sede central del PNV -lo hace al parecer Iñaki Aldekoa, que es miembro del consejo de redacción de la revista Hermes de la Fundación Sabino Arana- ha despertado las iras de los radicales contra el partido de Arzalluz. Así, el mismo Otegi acusó al PNV de 'clonar' su modo de actuar del de 'los fascistas españoles' y de montar 'un Estado policial' con la Ertzaintza, a la que equiparó con la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía.