Manolito Gafotas reflexiona sobre 'La paz mundial' en su versión teatral

A Manolito Gafotas siempre le gustó pisar los escenarios en los libros y en la gran pantalla. Actuó sin mucha fortuna en el belén viviente de su colegio, el Diego Velazquez, disfrazado de pastor, y ante un público entregado como 'el nuevo Joselito' versión El Zorro, cantando Campanera junto a una orquestilla playera. Y ahora, gracias a Ados Teatroa, el niño de Carabanchel Alto ha conseguido al fin interpretarse a sí mismo en la obra Manolito Gafotas.

La paz mundial, uno de los capítulos del primer libro de Manolito, sirve de excusa para que el niño reflexione sobre el mundo que le ha tocado vivir. 'Lo más difícil fue hacer nuestra propia versión, porque Elvira tenía cinco libros y muchos guiones para radio. Y, como en toda su obra no hay historias largas, elegimos una de ellas para contar la vida de Manolito', señaló Garbi Losada, guionista y directora del espectáculo, en la presentación ayer en Madrid. Todo comenzó con el capricho de la 'despiadada sita' Asun, que decidió presentar a sus alumnos -a los que no golpea 'porque es anticonstitucional' - a un concurso de disfraces en el barrio. Treinta 'bestias' vestidas de palomas de la paz 'para demostrar ante Carabanchel Alto, España, Estados Unidos y el planeta Tierra' que eran buenas personas. 'Seremos por un día los símbolos de la paz mundial y nuestro grito de guerra hasta el sábado será: ¡Los vamos a machacar', dijo enérgica la profesora a sus 'pequeños delincuentes'. Dicho y hecho, pues la idea del concurso no fue muy afortunada.

El productor, Santiago Sueiras, muestra su alegría por la acogida de la obra: 'Llevamos 164 funciones y la han visto más de 150.000 personas'. Manolito Gafotas estará en cartel en Madrid al menos hasta el 6 de mayo y luego viajará a Galicia, Murcia y Andalucía.En el País Vasco la obra se representó también en euskera.

Seis actores interpretan los 15 personajes. La pandilla de Manolito (Koldo Losada), formada por 'el chulito' de Yihad, la temible Susana bragas sucias, el 'cerdo traidor' de El Orejones López y M.M., una niña nueva en el barrio. Y, por supuesto, su familia: su madre, Cata, experta en collejas; el cómplice abuelo Nicolás; su padre camionero, Manolo; y su inseparable hermano, El Imbécil. Sin olvidar a la 'sita' Asun, la directora del colegio, la cotilla vecina Luisa y la psicóloga argentina.

'Queríamos hacer un espectáculo para todos los públicos, no sólo para adultos', relató Garbi Losada. 'Así que hablamos con Elvira Lindo y enseguida sintonizamos'. 'La única condición que puso fue conocernos personalmente, pero no exigió leer el guión'. Losada sentía 'pudor' por lo que Lindo pudiese pensar, pero a la escritora le gustó su propuesta, 'y nos vendió los derechos a nosotros y no a otros', subrayó la directora, quien quiso dejar claro que era una versión fiel de los textos de Elvira Lindo. Con el guión en la mano, idearon una puesta en escena muy dinámica, con dos plataformas y una serie de proyecciones que permiten una rápida sucesión de localizaciones.

La manolitomanía no cesa. Pronto se estrenará la película Manolito Gafotas 2001, de Joan Potau, y una serie de dibujos animados -proyectos ambos de los que Lindo se ha desvinculado -, mientras que las ventas de los libros siguen aumentando.