Pioneras bajo el varal
Un grupo de mujeres lleva el paso de la Virgen de la Merced en San Roque desde 1988
La Semana Santa de San Roque (Cádiz) ha sido declarada este mismo año como Fiesta de Interés Turístico Nacional por sus muchos alicientes. Uno de ellos es, sin duda, la procesión que cada Miércoles Santo recorre las calles de la localidad: 'la Virgen de las Mujeres'. Así denominan a Nuestra Señora de La Merced porque, desde que la Hermandad del Medinaceli decidió sacar esta imagen, en 1988, es portada por una cuadrilla de cargadoras.
Año tras año, Isabel Romero Delgado, ahora mayordomo de la Hermandad, se mete bajo los varales de carga del paso de La Merced como integrante de la primera cuadrilla de mujeres cargadoras de España. A sus 28 años, Isabel es toda una experta bajo el trono porque, desde que tenía 15 años, no ha faltado un día.
'Mientras tenga fuerzas, seguiré llevando a la Virgen', asegura Isabel. Sus palabras bien podrían ser atribuidas a cualquiera de los 40 mujeres cargadoras de San Roque. Su capataz, Jose Luis Benítez, explica: 'No puedo decir nada de ellas que no sean piropos y buenas palabras. No sé de dónde sacan las fuerzas para cargar durante cinco horas el Miércoles Santo y durante más de ocho el Viernes Santo. (En San Roque, todas las hermandades acompañan al Santo Entierro)'.
'Las cargadoras surgieron para que pudiesen sentir los que siente los costaleros bajo el paso de la imagen a la que durante todo un año veneran', añade Jose Luis Benítez.
'Incorporarse a la cuadrilla de cargadoras de La Virgen de La Merced resulta difícil porque las únicas bajas que se producen se deben principalmente a embarazos', señala el capataz. Amparo Muñoz, una ceutí que se siente sanroqueña por los cuatro costados y que lleva 12 años ininterrumpidos bajo los varales del paso de La Merced. 'Todo se lleva dentro y, desde que llegué a San Roque, tenía como objetivo llevar a la Virgen de las Mujeres', afirma. Amparo no se conforma con eso y espera poder ver algún día a sus dos hijas, una de ocho años y otra de quince meses, bajo el paso.
Las cargadoras sanroqueñas, a diferencia de la situación de discriminación que sufren las mujeres en hermandades y cofradías de Andalucía, cuentan con el apoyo incondicional de su junta de gobierno y, sobre todo, de los cargadores del Cristo de Medinaceli, titular de la Hermandad. 'Los ensayos los iniciamos con la Cuaresma, pero prácticamente no hacen falta, ya que casi todas pertenecemos a la cuadrilla primitiva, a excepción de las vacantes que cada año suelen producirse, pero que acaban recuperándose', declara Ana María Barreno, otra experimentada cargadora de La Merced que considera importantísimo el apoyo de los hombres que cargan el paso de Cristo. 'Ellos nos dan ánimos y nos ayudan en los ensayos. Ni mucho menos se puede hablar de rivalidad', explica.
Cuando quedan pocas fechas para otro Miércoles Santo, estas cargadoras de la Semana Santa andaluza sólo piensan en una cosa, la meteorología. Su peor experiencia la vivieron en el año 1997, cuando por causas de la lluvia, tuvieron que realizar su itinerario 'casi a paso ligero y sin bajar el paso', tal y como recuerda Ana María Barreno, que invitó a todas las hermandades andaluzas a dar especial cabida a la mujer.
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