Sobre 'La guerra de los niños'
Como lector de EL PAÍS, agradezco la publicación del artículo La guerra de los niños, que aborda seriamente el difícil problema de los menores que están implicados en situaciones de desamparo. Lo agradezco porque el artículo se aleja de las aproximaciones superficiales y morbosas que han sido habituales en las últimas semanas y que suelen acompañar a este tipo de hechos.
Sin embargo, creo necesario rectificar unas declaraciones que se me atribuyen en el sentido de que 'no debería haber marcha atrás en el procedimiento si el menor ha pasado entre seis meses y un año con una familia preadoptiva'. En realidad, lo que yo dije es que, al cabo de seis meses o un año de estar con una familia preadoptiva (generalmente mucho antes), el niño ya se siente miembro de esa familia y la familia lo siente como hijo suyo, por lo que la hipótesis de una nueva separación va a resultar difícil para el niño. Que deba o no deba haber marcha atrás en el proceso dependerá de las circunstancias de cada caso y deberá ser decidido por la instancia judicial correspondiente.-
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