Larra
El pasado 13 de febrero se cumplieron 168 años de la desaparición de uno de los autores más notables de nuestras letras: Mariano José de Larra. Al margen de su valía como escritor, Larra representa el paradigma del ciudadano comprometido con el progreso de su país, la lucha por la justicia y por los derechos humanos (en su postura ante la pena de muerte, por ejemplo). No sé si tiene explicación el hecho de que el piso de la calle de Santa Clara, donde El Pobrecito Hablador, a quien también le dolía España, se quitó la vida, acoja hoy una clínica dental, y no un museo que guarde su memoria para ejemplo de todos. No parece difícil llenar ese vacío a partir de los objetos y recuerdos que del escritor custodian sus descendientes y de los que se conservan en el Museo Romántico. En otros países esto ya se habría hecho hace tiempo. Aquí, 'en este país', aún no.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.