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VALENCIA

Barberá congela las plazas para inmigrantes pese a duplicarse anualmente las peticiones de asistencia

El fuerte incremento de las peticiones de ayuda por parte de los inmigrantes que se encuentran en Valencia no ha tenido respuesta del Ayuntamiento que dirige la popular Rita Barberá. Los 800 extranjeros no comunitarios que se acercaron en 1998 al Centro de Atención a los Sin Techo (Cast), según fuentes del Ayuntamiento, fueron 1.576

durante el año 1999 y 2.998 a lo largo de 2000. Si durante los pasados tres años las peticiones se han duplicado respecto al año anterior, fuentes municipales han asegurado que durante 2001 se están batiendo las marcas anteriores. Frente a estos números, las peticiones de ciudadanos comunitarios, fundamentalmente transeúntes nacionales, se han mantenido: las 406 de 1999 pasaron a 444 el año pasado. Este servicio, centralizado en la calle de Sogueros, puesto en marcha para canalizar las peticiones de albergue entre los distintos centros de acogida que tienen convenios con el Ayuntamiento, nació para prestar asistencia a los transeúntes de la ciudad pero en poco tiempo ha pasado a ser ampliamente requerido por inmigrantes. Actualmente son ya el 65% del total de sus usuarios.

Frente al aumento de solicitudes de asistencia, el responsable del servicio, Manuel Gómez, reconoció a este diario que la oferta de plazas es la misma desde hace dos años, unas 175, repartidas, entre otras entidades, en la Asociación Valenciana de la Caridad, el albergue San Juan de Dios, y el Hogar Social Juvenil.Pero no es la reducida oferta y la falta de incremento de plazas la única queja que el concejal socialista Pablo Gil explicó ayer a este diario.

Gil denunció la falta de recursos municipales específicos dedicados a la asistencia de los inmigrantes y señaló que la excusa del Ayuntamiento de que la inmigración es una competencia autonómica no es un argumento suficiente. A este aspecto añadió que que a los inmigrantes que carecen de documentos que acrediten que tienen permiso de trabajo o residencia, los albergues no les permiten alojamiento superior a los tres días. Gil planteó la necesidad de aumentar las plazas de asistencia a inmigrantes a través de más convenios, realizar un estudio de necesidades y crear una oficina municipal para coordinar la atención a los extranjeros en la ciudad.

El responsable del Cast rechazó la existencia de un límite de tres días y dijo que los extranjeros pueden estar meses en los albergues en función de su situación personal. Este diario intentó repetidamente obtener la versión de la concejal de Servicios Sociales, Laura Torrado.

Saturación

El concejal socialista Pablo Gil señaló ayer que los problemas de asistencia a inmigrantes en la concejalía de Servicios Sociales de Valencia que dirige la popular Laura Torrado no se centra en la derivación a albergues. Otro de los puntos negros de la gestión de Torrado es, a juicio de Pablo Gil, la saturación de los centros municipales de servicios sociales, responsables de canalizar ayudas a los inmigrantes sin recursos o necesitados de apoyo. El concejal socialista destacó que estos centros no están preparados para atender la 'avalancha' de peticiones de ayuda que reciben por parte de los inmigrantes, de forma que la lista de espera ha pasado de dos semanas a más de un mes. Además, como apuntó Gil, los recursos que ofrecen estos centros no están diseñados para la ayuda específica a los inmigrantes, de forma que el personal que trabaja en este servicio se ve obligado a 'suavizar los requisitos' administrativos para hacer accesibles las ayudas a los inmigrantes, que de otra forma no les llegarían, señaló el concejal socialista.

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