Tres grupos extranjeros con un objetivo en común

Tres son los grupos extranjeros que pugnan por hacerse con el control de Hidrocantábrico:

- EdP. Electricidade de Portugal (EDP) puja por Cantábrico en alianza con Caja de Asturias (Cajastur), la mayor entidad financiera compañía. EDP, una sociedad en fase de privatización, está participada en el 25% por el Estado portugués, que a su vez controla otro 5% a través de la Caixa Geral de Depósitos (CGD), de titularidad pública. Tiene una dimensión cinco veces superior a Hidrocantábrico, con una fuerte implantación en Latinomerica (Brasil, Chile y El Salvador), África (Cabo Verde, Marruecos y Mozambique) y en Asia (Macao). Su valor en bolsa es de casi dos billones de pesetas, tiene 13.500 trabajadores, con una facturación anual del orden de 500.000 millones de pesetas y unos beneficios en 1999 de 85.000 millones.

Además de su presencia en el sector eléctrico, opera en el de servicios (gestión inmobiliaria, formación de recursos humanos, informática y laboratorios de alta tecnología) y en las telecomunicaciones, en las que controla el 30% del mercado portugués. Participa en la petrolera GALP, con el 14,3%

- EnBW. Energie Baden-Württemberg (EnBW) es la tercera eléctrica alemana y va de la mano de Ferroatlántica. En su accionariado hay presencia de capital municipal y la empresa pública francesa EdF ha tomado un 25% de la compañía. EnBW, nacida en 1921 de la fusión de Energie-Versorgung Schwaben AG y de Badenwerk AG, tiene una potencia instalada casi cuatro veces superior a Cantábrico (10.000 megawatios frente a unos 2.700), una ventas de 800.000 millones y unos beneficios de 70.000 millones. EnBW está presente en Suiza (a través del 24,5% en Watt AG), en Noruega (posee el 51% de Skandinavisk Kraftmegling), en Chequia (21,6% de PT y el 16,5 de PRE), y en Hungría (el 25% en las comercializadoras Elmü y Emasz y el 21,4% en la planta de lignito de Matra).

- RWE. Es la primera compañía eléctrica alemana y la tercera europea tras fusionarse el año pasado con la alemana VEW, lo que le permitió recobrar un liderazgo en su país que le había arrebatado la fusión de sus competidores Veba y Viag. Hace una década emprendió su expansión internacional. Hoy está presente en EE UU, Italia, Portugal, Croacia, República Checa, Hungría y España, donde RWE participa con Iberdrola en una central eléctrica de ciclo combinado en Tarragona. Da empleo a 140.000 trabajadores. Está presente en el sector del suministro de agua, en el que es, por volumen, el tercer operador mundial. Está participaba en el 11,58% por el grupo asegurador Allianz Aktiengesellchaft. RW Holding AG posee el otro 10,94% y Kommunale Energie-Beteiligungs-Gesellschaft Mbh (KEB) controla otro 10,07%. El resto está en Bolsa.