La BBK, que controla el 7,5% de Iberdrola, se opone a la fusión y el BBVA guarda silencio

La BBK no ha tenido dudas al valorar las condiciones de la fusión. A media tarde de ayer, pocas horas después de que se conocieran las condiciones, comunicó oficialmente su oposición a la operación y anunció su voto en contra en el consejo de administración de Iberdrola del próximo lunes. La cuarta mayor caja por activos, se opuso en octubre por estar en desacuerdo con la ecuación de canje, porque no les parecía la mejor operación para el sector y porque no se cagantizaban las inversiones comprometidas en Euskadi. Con las nuevas condiciones impuestas por el Gobierno, la oposición de la caja, que en enero pasado adquirió un 1,5% más de Iberdrola, se ha agudizado.

El Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) votó en octubre en contra de la fusión porque el consejo de Iberdrola no evaluó la oferta que iba a presentar Gas Natural sobre la eléctrica vasca.Ahora el banco ha preferido dejar pasar el fin de semana, que, a buen seguro, será intenso en conversaciones al máximo nivel entre los presidentes de la entidad, los de las dos eléctricas, el de Repsol y el Gobierno.

Desde el punto de vista empresarial, la oposición del BBVA no ha tenido que variar. Sin embargo, esta operación tiene un alto trasfondo político, por lo que la posición del banco vasco estará sujeta a muchos condicionantes. El BBVA tiene tres posibilidades: aceptar la fusión y quedarse con el 5% de la nueva sociedad, como socio financiero de referencia; oponerse e intentar forzar una nueva ecuación de canje que le favorezca más o, por último, salir del consejo de Iberdrola para conseguir un conglomerado eléctrico con Repsol, aprovechando la venta de activos de Endesa e Iberdrola. Previsiblemente, en la reunión de la comisión delegada permanente del BBVA, que se celebra el lunes, se tomará una posición.

Pedro Luis Uriarte, vicepresidente y consejero delegado del BBVA, aseguró que la condición que ponían para aprobar la fusión 'es que cree valor para los accionistas'. Tal y como está planteado el canje para los accionistas de Iberdrola, no será fácil defender esta bondad.

Mientras tanto, La Caixa y Caja Madrid -cada uno de ellos con el 5% de Endesa- también han guardado silencio. Sin duda estarán atentos a los movimientos del BBVA. Este banco y la caja catalana quizá vuelva a hablar este fin de semana del proyecto eléctrico de Repsol y Gas Natural que se quedó en agua de borrajas. Por otro lado, Miguel Blesa, presidente de Caja Madrid, comprará acciones de la nueva eléctrica para tener el 3% y dijo que no le importaría convertirse en el accionista de referencia, si hay bajas.

Repsol YPF

La petrolera Repsol YPF, que se opuso a la fusión de Endesa e Iberdrola y llegó a sopesar el lanzamiento de una oferta por la eléctrica presidida por Íñigo de Oriol, considera que debe imperar la prudencia tras la decisión del Gobierno de aprobar la operación con condiciones.

Fuentes de la compañía hispano-argentina consultadas ayer indicaron que esperarán a conocer elplan de desinversión de activos antes de decidir si participa en ls subastas para adquirir centrales y pontenciar su crecimiento en el mercado eléctrico. 'Lógicamente, seguimos con interés' la decisión del Gobierno, agregaron las fuentes, que puntualizaron que debían estudiar los 'detalles y el procedimiento'.

Para Repsol YPF, 'la clave está en el desarrollo y la gestión' de la resolución del Gobierno.Repsol YPF no mantuvo ayer ninguna reunión informal para tomar una postura definitiva ante la nueva situación.