La Diputación de Guipúzcoa apuesta por un nuevo trazado de la autovía del Urumea distinto al original y al de los vecinos

La Diputación Foral de Guipúzcoa se empeña en seguir apostando en solitario por un trazado de la autovía del Urumea diferente al que plantean los vecinos. El diputado de Carreteras, Antton Jaime, presentó ayer las conclusiones de un estudio de su departamento y defendió como mejor solución un nuevo proyecto distinto al original y al de los afectados de Okendotegi, que respaldan los grupos de la oposición, PSE-EE, PP y EH. Las distintas alternativas serán sometidas a votación (no vinculante) el próximo jueves en las Juntas Generales.

Prointec 1, la propuesta defendida ayer por Jaime, discurre por un trazado intermedio a los dos iniciales, contempla un enlace directo con el segundo cinturón de San Sebastián a través de ramales de gran capacidad y tiene un coste de 8.085 millones de pesetas. 'Es la solución mejor valorada', dijo el diputado. 'Tiene una gran funcionalidad, una afección mínima a las viviendas y un coste reducido', agregó.

Su equipo rechaza de plano la solución de Okendotegi, que ha conseguido la unanimidad de los grupos de la oposición. 'Su funcionalidad es, con diferencia la peor, y su coste es aún mayor', discrepó. La solución planteada por los vecinos, presupuestada en 8.862 millones de pesetas, 'no cuenta con un enlace directo con el segundo cinturón'. Construir los ramales directos, requeriría, según Jaime, de una inversión adicional de 3.000 millones de pesetas más. 'Es cierto que no existe enlace directo, pero es porque nosotros propusimos un boceto y la Diputación se comprometió en desarrollarlo', señaló ayer Koldo Aduriz, portavoz de Okendotegi. En todo caso, indicó que 'las cifras no se parecen en nada a la realidad. La información que está dando Jaime es interesada'.

La propuesta de la Diputación no ha gustado a los vecinos afectados. 'Prointec 1 es el más agresivo con el medioambiente de todos los proyectos', puntualizaron ayer. Porque existen aún más alternativas. La Diputación foral encargó a un empresa un estudio técnico sobre las distintas soluciones de trazado de la autovía del Urumea, la defendida por la institución foral y la de los vecinos. Pero la misma compañía planteó tres nuevas soluciones, entre las que se encuentra la que ahora defiende el gobierno foral.