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35ª EDICIÓN DEL MIDEM DE CANNES

Empiezan a ensayarse sistemas seguros contra la piratería musical en Internet

La SGAE pone en marcha unas marcas de agua gratuitas y garantizadas

Los 2.175 expositores en el Midem de Cannes son una muestra de la convivencia actual entre la música digital y la analógica. Hay desde editores de discos de vinilo hasta distribuidores de música a través de Internet, además de una amplia gama de nuevos formatos multimedia. Todos están mezclados en los pasillos de esta feria y dan nota de la confusión que aún reina en este momento. Pero hay varias cosas que irán cambiando en los próximos dos años, según cálculos generales. Una de ellas será el avance imparable de la música en línea, y para ello se hará indispensable identificar cada pieza para tener algún control sobre su circulación.

'La música dejará de ser editada físicamente y, por lo tanto, tiene que haber alguna manera de identificarla. En los próximos dieciocho meses debería llegarse a algún acuerdo para lograr un estándar que permita hacerlo porque, aunque pueden convivir varios sistemas, es como si hubiera varios tipos de identificación para las personas y unos tuvieran pasaporte, otros un código de barras y unos terceros una matrícula. Lo mejor es que haya un estándar dominante', afirma Eduardo Bautista, presidente del consejo de dirección de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) y presidente ejecutivo de la CISAC (Confederación Internacional de Sociedades de Autores y Compositores). Pero no todos piensan igual.

En el Midem se han presentado varias soluciones en estos días. IBM lanzó su sistema Superdistribution, que permite el seguimiento de las canciones aun después de que los archivos han sido copiados y distribuidos a otras personas y que pondrá en marcha en los próximos meses. Brian Queen, representante de IBM en el Midem, piensa que su sistema puede ser el que se imponga. 'Es un software muy fácil de usar porque lo importante es que el usuario lo prefiera sobre otros', dice. 'Nosotros también apoyamos las marcas de agua y otras formas de protección y creo que en los años siguientes podrán convivir'. Otro de los sistemas de protección presentados es el de la empresa norteamericana Cantametrix, con su MusicDNA, una especie de huella digital.

Pero el que tiene mayores probabilidades de ser adoptado por la mayoría, según explica José Neri, director de la Sociedad Digital de Autores y Editores (SDAE), es el de las marcas de agua, que han superado todas las pruebas de ataques de los piratas, desarrollado por encargo de la SDMI (Security Digital Music Initiative) por la empresa Verance, que es el que ya ha empezado a usar la SGAE. 'Con este sistema no hay manera de quitar el código sin destruir la música. Es un sistema que podemos garantizar por 27 siglos', afirmó. 'Los socios de la SGAE pueden ya descargar gratuitamente desde nuestra página Portal Latino (www.portalatino.com) el software necesario, aunque para asegurar que sólo lo use el autor deberemos expedirles antes un certificado y una clave personal', añadió Neri.

Las marcas de agua servirán en poco tiempo para rastrear cada uno de los temas que se emitan por la radio. 'Hasta ahora sólo podíamos hacer estimaciones aproximadas y estadísticas, pero pronto podremos tener datos exactos', continuó.

Mientras tanto hay algunos sellos de discos que han empezado también a usarlas en las nuevas ediciones de sus discos, como Chrysalis con el último trabajo de Orgasmical o 18 Chulos con el de El Cigala. 'Las compañías pequeñas son las que se han sumado antes a esta iniciativa. Las multnacionales todavía tienen mucho miedo porque no saben qué va a pasar pero no tardarán en darse cuenta de que ésta es la mejor forma de defender sus intereses', señala Neri.

España 'dificile'

En Italia hay quienes piensan que Tonino Carotone es un italiano que se hace pasar por español o un argentino con raíces italianas. Quién sabe qué es lo que pensaron los que anoche lo vieron actuar en el Midem, en el espectáculo Rock en Ñ. Carotone ha logrado imponer su sarcástico tema Me cago en el amor en el mercado italiano y lo ha hecho entrar en la lista de los veinte autores que más han recaudado por derechos el año pasado. 'Lo de Italia es una pasión correspondida', dijo ayer el cantante. 'En Pamplona pensaba que estaba loco por cantar en italiano, pero es que a mí no me gusta eso de cantar en inglés o francés. Me gusta eso de que allá la gente cuando sale a trabajar se dice eso de 'Mondo dificile [título de su primer sencillo]'.

En el mismo programa actuaron los panameños Los Rabanes, viejos conocidos de Carotone. 'Nos conocimos en las calles de Barcelona, en los bares donde nos quedábamos hasta el amanecer', dice Emilio Regueira, líder del grupo. 'De esa época salieron todas las canciones de nuestro nuevo disco'. 'Y del mío también', acotó Carotone, 'la gente me preguntaba qué pretendía haciendo el golfo todo el tiempo, pero ése es mi método de trabajo, respirar lo que sucede en las fiestas clandestinas, en los bares. La composición está en la calle'. Regueira se mostró totalmente de acuerdo. 'La nueva música sale de la calle, de la espontaneidad del lenguaje y las cosas que dices'.

Tanto el uno como los otros han tenido más éxito en otros países antes que en España. 'No me lo explico', dice Carotone. 'El de España es un público difícil. Será porque España va bien'. Los Rabanes tampoco saben qué pasa y por qué, después de su estancia en Barcelona su sello los dejó tirados. 'Llamamos a Roberto Blades que escuchó nuestros temas, le gustaron y se los pasó a Emilio Estefan que quiso producir el disco. Ahora volveremos en verano a ver qué tal nos va en España'.

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