Grave decisión
Después de conocer la decisión de la Audiencia Nacional, ordenar el archivo de las actuaciones sobre las violaciones de derechos humanos cometidas en Guatemala entre 1980 y 1986, me veo en la necesidad de hacer pública esta grave decisión, ya que rompe la línea de actuación para acabar con la impunidad de los crímenes contra la humanidad como se ha hecho en los casos de Argentina y Chile.
Habría que recordar que en Guatemala se registraron 200.000 víctimas de matanzas y ejecuciones extrajudiciales, el 87% de etnia maya, lo que hace que los hechos se puedan calificar de genocidio. La actitud de la Audiencia Nacional contribuye a dejar indefensos a los familiares de las víctimas. En Guatemala no existen condiciones para celebrar un juicio justo. Los delitos que se citan en la querella presentada por la Fundación Rigoberta Menchú son perseguibles internacionalmente. Creo que somos muchos los ciudadanos españoles que nos sentimos orgullosos de las actuaciones llevadas a cabo en los casos de Argentina y Chile; por ello, no debemos bajar la guardia y reivindicar una misma actitud en el caso de Guatemala.
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