El Madrid baja el pistón

-El Madrid fue débil al elogio. Después de su estupendo partido frente al Oviedo, que significó la octava victoria consecutiva en el campeonato, bajó el pistón en Zorrilla. Ni hizo un fútbol brillante, ni demostró el instinto matador que se requería en un momento crucial de la Liga. Lejos de poner distancia sobre sus perseguidores, el Madrid ha dado un respiro al Deportivo y el Barcelona, que van a uña de caballo en persecución del líder.

En Valladolid se vio un partido intenso, pero bastante imperfecto. El temprano gol de Caminero sirvió para medir la capacidad de reacción del Madrid, que no se aceleró y buscó el empate con mucha ceremonia. Dispuso del balón y poco más. Se equivocó por su terca decisión de jugar por el medio, sin abrir espacios por los costados. En este capítulo, Savio volvió a decepcionar. Ni juega de extremo, ni se atreve a desbordar donde cuenta: cerca del área. Los delanteros madridistas se embotellaron enfrente de los centrales del Valladolid, encantados de la vida.

Roberto Carlos convirtió un tiro libre en el último minuto del primer tiempo y Morientes marcó el segundo. Suficiente para dar por ventilado el partido. Pero la defensa confirmó su inconsistencia en el arreón final del Valladolid, que logró el empate tras un penalti que levantará polémica. Atrás había quedado el aroma de gran fútbol que dejó el Madrid frente al Oviedo. En Zorrilla descendió a tierra.

El Deportivo salió de Málaga con una victoria de mérito. Concedió un gol en el arranque del encuentro y pudo pensarse en la típica flojera del equipo gallego fuera de su casa. No ocurrió así. Empató Makaay, pero el héroe fue Scaloni, poco acreditado como goleador. El interior uruguayo dio el triunfo al Deportivo con dos goles de última hora que adquieren más valor tras el resultado del Madrid en Zorrilla.

El otro beneficiado fue el Barcelona, ganador de un durísimo duelo en Valencia. Fue el partido con más faltas del campeonato (58), con el añadido de 11 amonestaciones y dos expulsiones. En esas condiciones, el Barça dio impresión de entereza. Y, además, jugó mejor que el Valencia. El equipo azulgrana ya tiene al Madrid a la vista, por lo menos virtualmente, pues el miércoles el Zaragoza visita el Bernabéu para poner la Liga en hora. Una victoria madridista volvería a establecer una diferencia significativa con respecto a sus rivales.

La jornada dejó algún resultado imprevisto. El Numancia venció en Mendizorroza al Alavés, que ha entrado en barrena con cuatro derrota consecutivas. En San Mamés, el Athletic ganó al Racing y dio un salto cualitativo. De preocuparse por el descenso ha pasado a aspirar a la Copa de la UEFA.