Garzón envía a prisión a Pepe Rei por estimar que sigue colaborando con los terroristas

Garzón alude en su resolución a un informe de la Unidad Central de Inteligencia (UCI) ratificado en diciembre de 2000, pero que era secreto hasta ayer. En él se concluye: 'La publicación Ardi Beltza, de la que es editor y responsable José Benigno Rey Rodríguez, supone la continuación de la actividad del Equipo de Investigación del diario Egin, toda vez que asume en su equipo de redacción a los colaboradores fundamentales de su responsable y supone la continuación de la línea informativa de 'señalamiento y satanización' de personas potencialmente objetivos operativos de la violencia terrorista de ETA o de sus formas de violencia complementarias, cual es el caso de la denominada kale borroka o violencia callejera'.

'Satanización y descrédito'

Garzón ya señalaba en un auto de 20 de noviembre de 1998 que el Equipo de Investigación de Egin marcaba a ETA el objetivo a través de una campaña de satanización y descrédito de la persona, y citaba 11 asesinatos entre 1993 y 1998 en los que había ocurrido eso. Las víctimas eran el empresario José Antonio Santamaría, el sargento mayor de la Ertzaintza Joseba Goikoetxea, el empresario José María Olarte, el jefe de la Policía Municipal de San Sebastián Antonio Morcillo, el concejal del PP Gregorio Ordóñez, el militante socialista Fernando Múgica, el ertzaina Ramón Doral, el empresario Isidro Usabiaga, Francisco Arratíbel y los concejales del PP Tomás Caballero y Manuel Zamarreño.

En el auto de ayer, Garzón señala que Ardi Beltza ha señalado como posibles objetivos al entramado familiar Delclaux-Zubiria, y a alrededor de 40 periodistas, a los que cita por sus nombres y entre los que destacan José Luis López de Lacalle, asesinado por ETA, y Luis del Olmo, Aurora Intxausti y Juan Francisco Palomo, a los que la banda terrorista ha intentado asesinar en los últimos meses, si bien esos procesos se siguen de forma independiente en otros juzgados.

Garzón celebró la vistilla prevista en la Ley de Enjuiciamiento Criminal y Pepe Rei le reprochó que le hubiera detenido el día anterior, porque, según expuso, siempre ha acudido a las citaciones de los jueces, especialmente a las de Garzón.

El fiscal Enrique Molina y el letrado de la Asociación de Víctimas del Terrorismo solicitaron el ingreso en prisión por la reiteración delictiva de Rei, mientras que el defensor Iñigo Iruin pidió que se mantuviera la situación de libertad bajo fianza de dos millones de pesetas. Iruin alegó indefensión ya que el caso ha estado secreto en los últimos meses y no ha tenido acceso a los informes policiales, pero Garzón precisa que aunque ese extremo es cierto, Iruin no pidió la suspensión del acto ni ninguna otra prueba diferente, salvo la aportación de un certificado médico.

Rei ingresó en la prisión de Alcalá-Meco sobre las ocho de la tarde. Previamente le había reconocido el forense, quien aconsejó la realización de un estudio cardiaco, ya que Rei tiene instalados cuatro by-pass.

La declaración de Rei ante el juez Juan del Olmo por posible inducción al asesinato del periodista Luis del Olmo se suspendió a petición del abogado defensor Iñigo Iruin, por defectos en la citación. Rei ha sido convocado de nuevo para el 29 de enero.