El Supremo norteamericano juzga la oficialidad del inglés
La política de english only se sentó ayer en el banquillo de los acusados del Tribunal Supremo de EE UU, por presunta violación del principio constitucional que prohíbe discriminar por razones raciales o culturales. El Supremo escuchó la demanda de Martha Sandoval contra el Estado de Alabama, que, en función de la ley de english only de 1990, le impidió pasar en español el examen para el carné de conducir.
Un total de 25 de los 50 Estados norteamericanos aprobaron a finales de los años ochenta y comienzos de los noventa leyes para establecer la oficialidad exclusiva del inglés en sus territorios. Estas leyes han sido derrotadas en varias ocasiones en los tribunales, por contradecir el espíritu constitucional de EE UU, que no establece la oficialidad de ningún idioma y levanta muchas barreras frente a la discriminación.
Sandoval ya había ganado su caso en dos tribunales, el Federal del Distrito y el de Apelaciones del 11 Circuito. Estos tribunales aceptaron que la prohibición de realizar el examen en español viola la ley de Derechos Civiles de 1964.
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