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EN PORTADA

Cambio de marcha

Los fabricantes se contentan con mantener este año un volumen de ventas similar al de 2000 en el mercado español

De un tiempo a esta parte, el mercado automovilístico español se encuentra cada vez más en consonancia con el del resto de Europa. Una prueba de ello es que el descenso de las ventas en España durante 2000 ha sido del 1,8%, y en Europa, según Luis Valero, director general de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) ha sido del 1,7%.

Unas cifras ante las que hay que mostrarse optimista a pesar de su naturaleza negativa. 'Descender un 1,8% tras un año récord de 1,4 millones de ventas no está mal', según Valero. Además hay que tener en cuenta que si a las ventas registradas finalmente -1.380.884 automóviles- se le suma la incidencia de la huelga de transportistas -portacoches-, que ya dura más de dos meses, y los aplazamientos en la decisión de la compra tras el anuncio de las mejoras fiscales para las familias numerosas y los que se acojan al Plan Prever es probabale que las ventas finales hubieran alcanzado incluso a las del año pasado.

En cuanto a las perspectivas para este año, tampoco son tan malas como se anunciaba hace unos meses. 'El fortalecimiento del euro frente al dólar, el descenso en el precio del crudo y el probable descenso también de los tipos de interés han cambiado el panorama', según el consejero delegado de Chrysler Jeep Iberia, Fernando D'Ornellas, para el que la primera parte del año no presentará un tirón tan eufórico como en 2000 pero al final del ejercicio las ventas serán semejantes.

De cualquier manera, a lo largo del mismo las marcas instaladas en España tendrán que pelear en tres frentes diferentes, pero importantes, para su evolución futura. El primero de ellos, de carácter nacional, supone un cambio significativo del marco impositivo en caso de que finalmente, y tal como está previsto, se transfiera a las comunidades autonómicas la capacidad recaudatoria del impuesto de matriculación. De ser así, el objetivo de fabricantes e importadores de que éste desaparezca se presenta mucho más lejano.

Los otros dos campos de batalla tienen carácter comunitario, pero su incidencia es también significativa. Tanto la normativa que se está preparando para neutralizar los efectos medioambientales, sobre todo en medidas de reciclaje obligatorio, como la liberalización del actual sistema de distribución pueden suponer un cambio significativo en el marco actual.

Su incidencia en la cuenta de resultados puede ser importante. El año pasado ya se produjo un descenso superior al 20% en la rentabilidad de las empresas automovilísticas instaladas en España, cuyo margen en término de beneficios respecto a la facturación se sitúa en torno al 2%.

Sin embargo, las plantas españolas se encuentran en algunos casos entre las más productivas de sus respectivas firmas y muchas de ellas pueden verse afectadas este año por decisiones que puden suponer la adjudicación de nuevos modelos. En este sentido, Rick Wagoner, presidente de General Motors, confirmó en Detroit las declaraciones del responsable europeo apostando por la fabricación de un segundo modelo en Zaragoza y Ford puede construir el nuevo Fiesta en Almussafes e incluso un modelo de Mazda.

Nuevos mercados

Las restricciones anunciadas en las ventas de automóviles de Estados Unidos para este año, junto al mantenimiento previsto en Europa y sobre todo la madurez de ambos mercados, van a desplazar todavía más la atención de los grandes fabricantes mundiales hacia los mercados asiático y latinoamericano. En este último las inversiones previstas para el próximo trienio se acercan a los 10.000 millones de dólares con las que se pretende incrementar un tercio la capacidad actual de producción. La mayor parte se destina al ámbito de Mercosur, lo que no deja de ser una paradoja, según algunos analistas, ante la situación económica que atraviesan en esta zona. Algunos de ellos destacan, por el contrario, las ventajas que suponen los privilegios fiscales de México respecto al mercado norteamericano y europeo. En Asia las esperanzas son aún mayores. El mercado de más tamaño de esta zona, Japón, ha rozado ya los tres millones de automóviles tras un crecimiento del 2,7% en 2000 después de cuatro años de descensos. General Motros anunció recientemente su intención de acaparar el 20% de este mercado en 2004 tras la puesta en marcha de su propia red de concesionarios. Por su parte, Tailandia, Malasia, Indonesia y Filipinas, los principales mercados del sureste de este continente han crecido más del 50%. Pero donde mayores perspectivas de crecimiento se presentan es en el mercado chino, que prepara en estos momentos su incorporación a la Organización Mundial de Comercio (OMC). Con una población de 1.300 millones de habitantes, China cuenta con un parque automovilístico semejante al español. Shanghai será la Detroit china y acaparará importantes inversiones en los próximo años. General Motors y la coreana Hyundai han sido los últimos en manifestarse en ese sentido.

Un ejemplo de las agitadas circunstancias por las que atraviesa la industria mundial del automóvil lo representa la firma Nissan. Una marca japonesa, al frente de la cual se encuentra un brasileño como delegado de la firma francesa Renault, que adquirió un paquete de control (36,8%) cuando ésta atravesaba un momento difícil. Carlos Ghosn no sólo ha conseguido salvar la difícil situación, sino que se ha adelantado a los planes previstos y tras siete años consecutivos de pérdidas ha presentado unos resultados positivos de 1.600 millones de dólares en el primer semestre del ejercicio actual. Por si fuera poco, los planes para reducir gastos y neutralizar la deuda se presentan de tal manera que los ingresos previstos para el año fiscal que finaliza el próximo 31 de marzo serán de unos 2.300 millones de dólares, lo que supone multiplicar por cuatro la cifra anunciada en mayo. Y, por si fuera poco, ha anunciado la construcción de una nueva planta en el Estado de Misisipí, para lo que han destinado cerca de 1.000 millones de dólares. En el año 2003 saldrán de estas instalaciones los nuevos utilitarios, monovolúmenes y vehículos comerciales de Nissan. Ghosn ha sido el protagonista más destacado en las jornadas para periodistas y profesionales del Salón Internacional del Automóvil de Detroit, en el que ha destacado también la apuesta innovadora y vanguardista de sus prototipos.

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