Las ventas de automóviles rompen 4 años de fuerte crecimiento con una caída del 1,8%

El cierre del año en el sector automovilístico ha estado plagado de malas noticias. La subida de los carburantes y la menor fuerza de la economía han hecho mella en la venta de coches. El resultado final ha sido de 1.380.884 unidades frente a 1.406.246 de 1999. El mercado de todoterrenos se ha sumado a la corriente bajista del sector, con un cierre en 2000 de 87.948 unidades, un 6,3% inferior a las de 1999. En las ventas a particulares y empresas no alquiladoras de vehículos, el principal núcleo de la oferta automovilística, 'las caídas son más acusadas' y se sitúan en el entorno del 2,8% anual, según reconoce la patronal de fabricantes de vehículos Anfac. Esta fuente indicó que la 'brusca' caída del mercado en diciembre ha afectado en casi medio punto porcentual a la evolución final del mercado anual.

También se han observado retrocesos en el Plan Prever durante los últimos meses del año, aunque los resultados positivos acumulados durante la primera parte del ejercicio implican que las 271.000 operaciones acogidas a los beneficios de este plan sean un 8% superiores a las de 1999.

Influencia del Gobierno

El sector intentó quitar hierro al desinfle de la curva de ventas argumentando que en la caída de diciembre ha influido 'poderosamente' el anuncio de las medidas gubernamentales de ampliación del Plan Prever de 80.000 a 120.000 pesetas para los coches con más de diez años que funcionen con gasolina súper y que sean cambiados por otro nuevo con catalizador. También se aprobó la deducción en un 50% del impuesto de matriculación para los turismos familiares que sean adquiridos por los titulares de familias numerosas. Luis Valero, director general de Anfac, declaró que, 'sin estos anuncios a destiempo, habríamos tenido un mes normal y posiblemente nos habríamos acercado mucho a la cifra del año pasado'.

El director general de Anfac saludó las ayudas fiscales a la compra de vehículos aprobadas por el Gobierno, porque han mejorado el impuesto para un colectivo importante como son las familias numerosas, y han extendido el Plan Prever a los coches que usan gasolina con plomo. Valero explicó que los fabricantes están satisfechos con estas medidas, y dijo que ahora, a corto plazo, su principal 'preocupación y batalla' es que no se traspase el impuesto de matriculación a las comunidades autónomas. Explicó que esto provocaría la consolidación del impuesto de matriculación, que 'creemos que un país productor no debería tenerlo. Debemos tener la fiscalidad parecida al resto de los países productores de coches, que son Francia, Alemania, Italia y el Reino Unido', indicó.

La caída de las matriculaciones de 2000 contrasta con las previsiones iniciales, que contemplaban un aumento en el crecimiento de vehículos comercializados de un 5% o 6%. No obstante, los fabricantes y vendedores de coches aseguraron que el volumen de mercado en el año 2000 'se debe considerar positivo, teniendo en cuenta el fuerte crecimiento de los cuatro últimos años'.

Valero apuntó que las perspectivas para enero son buenas, ya que 'lo que se ha dejado de vender en diciembre se hará en enero'. Las primeras impresiones de Anfac para el actual ejercicio son conservadoras, ya que se confía en cerrar con una cifra de matriculaciones similar a la de 2000, que, según reiteró Valero, 'es muy positiva, pese a todo'. Otro hecho que las asociaciones automovilísticas han destacado como negativo para el mercado en diciembre ha sido la huelga de transportadores de automóviles, que han dejado a la mayoría de concesionarios sin coches que entregar.

Renault confirmó su liderazgo en el mercado español en 2000, con un cuota del 12,7%. La marca francesa vendió 175.946 unidades, cifra que espera superar este año.