El partido único se cobra otro 'primera'
El Villarreal, derrotado en los penaltis por el Granada, un 'Segunda B'
La Copa del Rey continúa haciendo estragos entre los equipos de la Primera División. Si en la primera ronda del torneo cayeron varios conjuntos de la máxima categoría, entre ellos el mismísimo Real Madrid, humillado por el Toledo, el Villarreal fue el que ayer probó el sabor agridulce, según los paladares, de la nueva fórmula de la competición: a un solo partido, en el campo del equipo más débil, en las dos primeras eliminatorias -la siguiente, los octavos de final, se disputará ya a dos-.
El Villarreal cayó en los penaltis tras un encuentro que mantuvo la incertidumbre hasta el último suspiro. Ni el Granada ni el Villarreal perdonaron una peseta: fueron a por todas desde el principio, entre pelotazos y encontronazos de los jugadores. Luego, cuando el Villarreal creyó tener la clasificación en el zurrón tras marcar Cagna a falta de 15 minutos, apareció Sierra para prolongar la eliminatoria, que acabó cayendo del lado andaluz en los penaltis.
El Villarreal, que se plantó en Granada sin Amor ni Víctor Fernández, se encomendó a los trallazos de Moisés y Craioveanu. Ambos metieron en apuros a Pindado, uno de los protagonistas del encuentro. Pero también el Granada puso en aprietos al Villarreal: Pedro dispuso de una clarísima ocasión con López Vallejo en el suelo, pero le pegó muy mal a la pelota, que se fue a la grada.
Poco más tarde, a punto de finalizar la primera parte, Unai se topó con el portero Pindado, rápido en su respuesta al remate de cabeza por parte del defensa castellonense.
El Villarreal fue ganando terreno ante la impotencia del Granada, que pareció diluirse. En un contraataque, Cagna batió a Pindado de un fortísimo tiro.
Sierra forzó la prórroga, y en el tiempo suplementario el Granada tomó aire mientras que el Villarreal se descompuso totalmente: perdió sitio y empuje. Así, Sierra estuvo a punto de marcar el segundo gol andaluz.
A los lanzamientos desde los once metros llegó más entero el Granada. Y, como Gaitán y Gracia fallaron por el Villarreal, al equipo local incluso le sobró un penalti para firmar y rubricar su clasificación para los octavos de final.
