Los bancos renuncian al 1% de Telefónica Móviles que tenían reservado

Las entidades coordinadoras de la salida a Bolsa de Telefónica Móviles no han ejercicio la opción de compra de 45 millones de acciones, equivalente al 1,07% del capital de la compañía. La renuncia impide a Móviles reducir su deuda en 82.361 millones de pesetas, como había previsto al poner en marcha la colocación. Las entidades podrían haber ejercido su opción a 11 euros por cada acción y el pasado viernes cerraron a 10,40.

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La caída de Telefónica Móviles desde su salida a Bolsa el pasado 22 de noviembre está afectando a los inversores que acudieron a la oferta pública de venta de acciones (OPV) y tendrá su repercusión en la tesorería de la empresa.La cotización de Móviles, que tiene una cuota del mercado español superior al 56% y mantiene un fuerte potencial de crecimiento en América Latina y Europa contratas con la pérdida que acumula desde su estreno en Bolsa. Desde el pasado 22 de noviembre cae un 5,7% y el máximo que ha marcado son 11,47 euros por acción.

El varapalo bursátil tendrá repercusión en el endeudamiento de la compañía, ya que la caída de la colocación desde el precio de salida (11 euros) ha llevado a las entidades financieras coordinadoras de la colocación (encabezadas por BBVA, BSCH, Invercaixa, JP Morgan, Morgan Stanley y Crédit Suisse First Boston) a desestimar la opción de compra que tenían sobre 45 millones de acciones, referenciadas a 11 euros, a través del denominado green shoe (reserva de títulos).

La renuncia de las entidades deja las arcas de Móviles sin los 82.361 millones de pesetas que hubiera reportado la emisión de 45 millones de títulos dirigidos a bancos y cajas de ahorros. La información enviada ayer por Telefónica Móviles a la Comisión Nacional de Mercado de Valores (CNMV) recuerda que las instituciones contaban con un plazo de un mes desde la salida a Bolsa de la compañía para ejercer su opción de compra al precio de salida.

Según las cuentas de la operadora antes de poner en marcha la OPV, la venta entre inversores particulares e institucionales de 300 millones de acciones y la posterior ejecución del green shoe hubiera dejado la deuda de Móviles entorno a 4.316 millones de euros (718.121 millones de euros). Sin el green shoe, la cifra se queda alrededor de 4.810 millones de euros, aunque los responsables de la empresa aseguran que tienen las necesidades de financiación "cubiertas". El hecho de que esos 45 millones de acciones queden en manos de Telefónica tendrá una segunda consecuencia, puesto que reducirá el porcentaje de acciones que se mueve libremente en el mercado (el denominado free float) al 7,85% del tota del capital, en lugar del 8,92% que hubiera fluctuado de haber colocado los títulos entre los inversores institucionales. La operadora tiene previsto ampliar un 0,5% su capital para repartir opciones sobre acciones (stock options) entre todos sus empleados.Con la colocación, destinada a financiar principalmente la adquisición de licencias de telefonía móvil de tercera generación en Alemania, Móviles obtuvo 3.300 millones de euros (549.073 millones de pesetas).

Aunque entre los planes de la compañía está ampliar a medio plazo el capital cotizado en Bolsa, la colocación ya realizada tiene la ventaja de que permite afrontar operaciones de concentración (adquisiciones y fusiones) mediante el intercambio de títulos. De ese modo, Móviles baraja la posibilidad de entrar en el mercado británico.