¿Qué hacer con Milosevic?
El presidente de Yugoslavia, Vojislav Kostunica, ante la pregunta sobre el destino de Milosevic, hasta ahora ha salido del paso con la respuesta-modelo: "No es una prioridad en este momento". Con el triunfo en las elecciones de ayer y la llegada al poder en Serbia, el Gobierno de la DOS tendrá que afrontar pronto la situación de ¿qué hacer con Milosevic? Entre la posibilidad de extradición, que plantea el Tribunal Penal Internacional de La Haya, y la de juzgarlo en Serbia, los nuevos dirigentes se inclinan por esta segunda opción.El futuro primer ministro, Zoran Djindjic, respondía el viernes a un grupo de periodistas: "Sobre Milosevic decidirán los tribunales y no nosotros". A la pregunta concreta sobre la extradición a La Haya, dijo: "De momento, las leyes no permiten la extradición. La Constitución federal no la permite, y para cambiarla necesitamos dos tercios de mayoría, que no tenemos en el Parlamento federal. Vamos a discutir con Montenegro el año próximo la reforma de la Constitución, y en este sentido se podría hacer algo". Para Djindjic, "no sería bueno presentar de nuevo a Milosevic como una víctima de la política mundial, alguien contra quien lucha en La Haya todo el mundo". Según Djindjic, "es importante juzgar a Milosevic por lo que ha hecho en el país, por el dinero que quitó a los pobres y que transfirió a sus cuentas".
Para el viceministro federal de Relaciones Económicas Internacionales, Boran Karadzole, "será muy posible ver a Milosevic preso por ladrón más que por otra cosa. Sería mejor condenarlo por lo ladrón que fue que por los crímenes de guerra, que serían más difíciles de probar. Nosotros no somos como los alemanes, que lo apuntaban todo. No sé como haría La Haya para probar los crímenes de guerra. Me gustaría verlo condenado aquí por la corrupción".
Djindjic se mostró también partidario de juzgarlo por las pruebas existentes en el país, "donde no son posibles excusas o argumentos históricos. Se puede explicar por qué se inició una guerra. Unos lo creerán y otros no. Pero nadie puede aclarar cómo posee una casa de unos 850 millones de pesetas con un sueldo mensual de 18.000. Debemos empezar por esas cosas que son evidentes".
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