Estalla una bomba en el diario de izquierdas italiano 'Il Manifesto'
Una bomba de potencia media que estalló ayer en la sede del periódico de izquierdas Il Manifesto despertó en Italia el temor a un resurgimiento del terrorismo. Cinco días atrás, en el Duomo de Milán, otra bomba fue desactivada por las fuerzas de seguridad. La colocación de este último artefacto fue asumida por el movimiento anarquista Solidaridad Internacional en una carta enviada al diario romano Il Messaggero.
En la misiva, que contenía algunos gramos del mismo material explosivo usado en la bomba, se pedía la liberación del italiano Claudio Lavazza, miembro del grupo Proletarios Armados para el Comunismo, actualmente preso en España por haber participado de una acción delictiva en la que mató a dos mujeres de la policía.En el curso de una sesión parlamentaria extraordinaria tras el nuevo atentado, el ministro italiano de Interior, Enzo Bianco, expresó ayer su preocupación por "una vuelta peligrosa al uso de la violencia y del recrudecimiento del terrorismo en acciones de delincuencia con connotación de intolerancia política". Para el ministro, se trata de un episodio particularmente grave porque "pretendía golpear el principio fundamental de la democracia, que es la libertad de expresión".
Bianco expresó su solidaridad con los periodistas de Il Manifesto y confirmó, además, que un hombre herido en el atentado, que podría perder una pierna, fue retenido por la policía porque podría ser autor del mismo. Se trata del ultraderechista Andrea Insabato, de 41 años, que perteneció al grupo Terza Posizione y que fue condenado a un año y medio de cárcel por quemar en 1992 una bandera con la estrella de David en el Estadio Olímpico de Roma.
Para el eurodiputado de Refundación Comunista Giuseppe di Lello, ex magistrado del grupo anti Mafia del asesinado juez Giovanni Falcone, "se ha reanudado la temporada de las bombas" en Italia.
