Los expertos hallan indicios de agua salada en la mayor luna de Júpiter
Ganimedes puede ser el tercer satélite acuoso del planeta gigante
Los científicos que están estudiando los datos enviados a la Tierra por la sonda de la NASA Galileo han concluido que Ganimedes, la mayor luna de Júpiter, puede contener un "océano" de agua salada bajo su superficie. De confirmarse los resultados, Ganimedes se convertiría en el tercer satélite joviano que contiene agua, después de Europa y Calisto. La presencia de agua es interesante porque muy probablemente es una condición necesaria -aunque no suficiente- para la existencia de vida.El agua salada de Ganimedes parece hallarse en estado líquido formando una gruesa capa bajo la superficie de este satélite, cuyo tamaño es superior al de planetas como Mercurio o Plutón. Los investigadores que analizan los datos de la sonda Galileo están coordinados por Margaret Kivelson, de la Universidad de California en Los Ángeles, y presentaron sus conclusiones el sábado en un congreso de la Unión Geofísica Americana celebrado en San Francisco.
Kivelson explicó que las mediciones tomadas por la Galileo durante una aproximación muy estrecha al satélite en mayo pasado sugerían "fuertemente" la existencia de un océano subterráneo. Si la masa de agua fuera igual de salada que las terráqueas, el océano ganimedeano tendría varios kilómetros de profundidad y estaría hundido a unos 200 kilómetros por debajo de la superficie del satélite.
Otros científicos que han estudiado los materiales de la superficie de Ganimedes han concluido que algunas partes del satélite poseen minerales salinos que pueden explicarse si las rocas de esa zona hubieran estado expuestas en el pasado al agua salada.
"Son similares a los minerales de sales hidratadas que hemos visto en [la luna] Europa, y posiblemente son el resultado de flujos de salmuera [agua saturada de sal] que abrieron su camino hacia la superficie mediante erupciones o a través de fracturas en la superficie", dijo Thomas McCord, un geofísico de la Universidad de Hawaii en Honolulú.
Dave Stevenson, del Instituto Tecnológico de California (Caltech), afirmó que la radiactividad natural del interior rocoso de Ganimedes es probablemente capaz de producir el suficiente calor para mantener es estado líquido una capa de agua situada entre dos estratos de hielo, siempre que se sitúe a 150 o 200 kilómetros de profundidad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.