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Los partidos catalanes acercan posiciones ante la discusión de la nueva financiación autonómica

Los partidos catalanes han aproximado criterios sobre el nuevo sistema de financiación autonómica. Hay coincidencia, aunque con matices, en que la Generalitat participe en una cesta de impuestos, y no sólo en el IRPF. La discusión se centra en la participación del Gobierno catalán en la Agencia Tributaria y en fijar el concepto de de solidaridad entre las comunidades. Todos asumen, en cambio, que debe mejorarse la financiación de la sanidad, la necesidad de dar solución al déficit de la sanidad.

El consejero de Economía, Artur Mas, mantiene contactos con los partidos catalanes para tratar de aproximar posiciones con vistas a la negociación que se inicia a mediados de enero. El actual sistema vence a finales de 2001. El Ejecutivo catalán propuso en su momento tener participación en todos los grandes impuestos, algo que el Gobierno central consideró excesivo. Pero ahora, tras la mayoría absoluta del PP, CiU tiene menos influencia.La actual financiación está basada en la cesión a las comunidades de un 30% del IRPF; de los impuestos de sucesiones, transmisiones patrimoniales y patrimonio, y en diversas tasas. La Generalitat recauda por impuestos 600.000 millones de pesetas, casi una tercera parte de los 2,1 billones de ingresos previstos para el año próximo. Los 1,5 billones restantes proceden de transferencias de la Administración central para financiar los servicios que presta en educación, sanidad y seguridad, sobre todo.

El Gobierno no parece tener prisa por empezar a debatir la nueva financiación de las autonomías. En Cataluña, las posiciones de los distintos grupos presentan puntos comunes y discrepancias.

- Gobierno catalán. Mantiene sobre el papel la propuesta hecha antes de las pasadas elecciones generales: recaudar el 60% del IRPF, el 50% del IVA y el 100% del resto de los impuestos, es decir el de sociedades y los especiales. La propuesta del Ejecutivo catalán trata de corregir lo que considera un déficit fiscal con el conjunto del Estado, que según el presidente, Jordi Pujol, oscila entre 600.000 millones y 1,3 billones cada año. También quiere el traspaso de la gestión de la Agencia Tributaria a la Generalitat. Antoni Vives, secretario general de Planificación Económica de la Generalitat, destaca elementos sólidos de consenso en la posición de los partidos catalanes. Vives califica la propuesta del presidente valenciano Eduardo Zaplana, del PP, de ceder una porción en varios impuestos, como "la no propuesta".

- PSC. La propuesta de los socialistas catalanes pasa por la cesión a las autonomías de una cesta de impuestos formada por el IRPF, el 40% del IVA y el 100% de los impuestos especiales, señala Antoni Castells, miembro de la ejecutiva y responsable de economía del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC). Respecto a Agencia Tributaria, el PSC defiende que forme un consorcio con la Generalitat. Castells subraya que la nueva financiación debe garantizar autonomía e igualdad de ingresos por habitante para las comunidades. También debe garantizar la solidaridad, de tal modo que cada comunidad pague según su capacidad y reciba según su población. Otro requisito del nuevo sistema debe ser que conduzca a "una aproximación gradual de recursos con las comunidades como el País Vasco y Navarra, y que aborde la incorporación de la sanidad a la financiación autonómica", destaca Castells. Para el PSC, está por ver si CiU acaba respaldando la ley de estabilidad presupuestaria, "que lamina las competencias de las comunidades autónomas". Castells dice que CiU ha emprendido una "fuga hacia adelante" con su propuesta de pacto fiscal, irrealizable cuando por su apretada mayoría, depende del Partido Popular (PP) en Cataluña para seguir gobernando en Cataluña.

- PP. El objetivo del nuevo sistema debe ser "la autonomía y la solidaridad", afirma el presidente del PP catalán, Alberto Fernández Díaz, que hace hincapié en que el PP quiere arrancar la negociación planteando la cesión de "una parte del IVA y de los impuestos especiales sobre el tabaco, la gasolina y el alcohol". El PP no se plantea la cesión del impuesto de sociedades "por las dificultades que supone", dice Fernández Díaz. En cuanto a la Agencia Tributaria, añade que su grupo defiende "no la cesión, sino la participación de las comunidades".

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- ERC. En una primera fase, Esquerra Republicana (ERC) propone recaudar el 60% del IRPF, la totalidad de los impuestos especiales y el de sociedades. Y en la segunda, a partir del 2006, todos los impuestos, hasta 840.000 millones más.

- IC-V. La propuesta de Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) consiste en la cesión de una cesta de impuestos integrada por el IVA, el IRPF, el impuesto de sociedades y los impuestos especiales. Este grupo plantea la creación de un fondo que corrija las desigualdades entre comunidades autónomas y realice transferencias que sirvan para elevar el nivel de los servicios públicos en las comunidades menos ricas.

Arduino Vannucchi

Hacienda crispa el debate con el déficit cero

La negociación no ha empezado con buen pie. El Gobierno, a través del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, acaba de plantear que las autonomías firmen previamente un compromiso de déficit cero. Para ello, ha presentado un proyecto de Ley de Estabilidad Presupuestaria que ya tiene el rechazo por adelantado de la Generalitat y de las seis comunidades autónomas gobernadas por el PSOE. El argumento básico en contra es que se invaden competencias autonómicas con una ley que obligue a no tener déficit.De cara a la próxima negociación, el traspaso de una parte del IRPF no ha dado los frutos deseados. Aunque el Gobierno catalán depositó grandes esperanzas en la cesión del 30% del IRPF, se trata de un impuesto con una recaudación que crece cada vez menos porque se han aplicado rebajas fiscales desde 1999. El futuro apunta a que los llamados impuestos directos -que los ciudadanos pagan según sus ingresos, como el IRPF- crecerán de forma moderada. Y aumentarán los indirectos -como el IVA, que se paga por igual con independencia del nivel de renta. Para el año próximo está previsto que por IRPF se recaude el 5,5% más en todo el Estado y el 8,5% por IVA.

Pero aunque la Generalitat no ha ganado nada con el 30% del IRPF, tampoco ha perdido dinero con la cesión. La razón es que el Gobierno está obligado a compensar a las comunidades si los ingresos por IRPF son más bajos que los que percibían antes por transferencias del Estado. El Gobierno ha tenido que compensar a la Generalitat con 2.000 millones de pesetas en 1997 y 1998, según los últimos datos de la liquidación del Departamento de Economía. Ello se debe a que los ingresos por IRPF fueron inferiores a lo que el Ejecutivo catalán habría percibido con el criterio anterior, es decir, con el incremento total de la economía (PIB nominal). Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha han preferido hasta ahora seguir recibiendo transferencias del Estado en lugar de la cesión del IRPF.

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