El PP exige a los socialistas que unifiquen su posición sobre el trasvase del Júcar al Vinalopó El Ministerio de Medio Ambiente da el visto bueno al estudio de impacto ambiental

Espoleado por haber logrado que el Ministerio de Medio Ambiente informe a favor del trasvase del Júcar al Vinalopó, el Partido Popular de la Comunidad Valenciana exigió ayer del PSPV-PSOE un pronunciamiento explícito sobre el proyecto. "Queremos que se quiten la careta [los socialistas] y que digan si son o no partidarios del trasvase", dijo en Alicante el diputado popular Rafael Maluenda, quien, arropado por dos alcaldes populares del Vinalopó, criticó que el PSPV sea contrario al desvío de caudal en La Ribera y "parece" que partidario en Alicante.

El PP azuzó ayer a los socialistas hasta la provocación. Incluso invocó al espíritu de un diputado socialista fallecido, el ex alcalde de Aspe Ramón Berenguer, que rubricó con los populares el pacto valenciano del agua, para denostar la posición que mantiene el PSPV sobre el proyecto de trasvase de la cuenca del Júcar a la del Vinalopó. Estimulado tras conocer que el Ministerio de Medio Ambiente ha emitido un informe favorable al proyecto de construcción del trasvase Júcar-Vinalopó, el diputado autonómico del PP, Rafael Maluenda, denunció que el PSPV-PSOE está "incumpliento" el pacto valenciano del agua. Los socialistas, dijo, "están perjudicando con su actitud a la sociedad civil" por sus contradicciones sobre el trasvase. En su opinión, el PSPV-PSOE mantiene varios criterios "en función del territorio en el que se encuentren, a la hora de definir si respaldan o no este trasvase". Los ciudadanos no entienden, según Maluenda, que el PSPV se pronuncie en contra del proyecto en La Ribera (comarca valenciana donde arrancará el trasvase) y "parece" que lo defiendan en el Vinalopó, L'Alacantí y La Marina Baixa (comarcas alicantinas receptoras del agua).

En rueda de prensa, el parlamentario popular censuró que los diputados socialistas Joan Francesc Peris y Antoni Lozano secundaran el viernes con su presencia la protesta vecinal contra el trasvase en la Acequia real del Júcar. Unos 400 vecinos argumentaron en esa protesta que el Júcar carece de excedentes hídricos desde hace 20 años.

"Hay que recordar", dijo Maluenda, que el plan de cuenca del Júcar no obtuvo ni un solo voto en contra, y lo que hace el proyecto de trasvase es respetar escrupulosamente ese plan, puesto que al Vinalopó sólo se trasvasarán excedentes del Júcar. Y en el PP, aseguró, se encargará de que existan sobrantes con la política de ahorro que está llevando a cabo. El político popular explicó que en el plazo de "dos o tres años", la cuenca del Júcar ofrecerá sobrantes de agua, "alrededor de 105 hectómetros cúbicos anuales", merced a las ampliaciones de diversas depuradoras, a la reutilización de agua y a la modernización de sistemas de riego en las acequias reales del Júcar y el Camp de Turia. 80 de esos 100 hectómetros cúbicos, anunció, "vendrán a Alicante para abastecimiento humano y consolidación de los regadíos".

El Gobierno central ha redactado un informe medioambiental que respalda esta infraestructura hidráulica. El PP recalca que el objetivo es "trasvasar exclusivamente al río Vinalopó los sobrantes de agua del Júcar" sin que los usuarios de esta última cuenca "pierdan el derecho de disfrute y utilización".

El respaldo del Ministerio de Medio Ambiente al trasvase ha encarecido el proyecto 8.000 millones de pesetas. El presupuesto de ejecución de la obra hidráulica ya alcanza los 35.000 millones de pesetas que, según el PP, se financiarán con fondos del Estado. Maluenda señaló que el proyecto ya está preparado para su licitación. Para ganar tiempo, "se adjudicarán a la vez el proyecto y la obra".

El PP va a redactar una moción en defensa del trasvase para elevarla a todas las administraciones públicas de la Comunidad. "Queremos que se pronuncien todos los ayuntamientos, especialmente los gobernados por los socialistas", dijo Maluenda, quien criticó especialmente a los alcaldes socialistas de Elche, Diego Macià, y Elda, Juan Pascual Azorín, de quienes dijo que están "escondidos".

Antes de repasar una retahíla de inversiones de la Generalitat en materia hídrica, a Maluenda le quedó tiempo para el chovinismo y para lapidar aún más al principal partido de la oposición. "Cuando ellos [los socialistas] gobernaban las instituciones dejaban que Valencia lograra todos sus objetivos a costa de Alicante".