La muerte de tres amigos tiñe de dolor el tercer disco de Idi Bihotz

El Último Ke Zierre

Ciertas sombras planean sobre la tercera entrega del conjunto Idi Bihotz. La muerte en accidente de tráfico de dos amigos de uno de los guitarristas y el asesinato en Colombia del cooperante Iñigo Egiluz, de la cuadrilla del grupo, dejaron su huella durante el proceso de composición de un disco que lanza un gemido de dolor desde su mismo título: Negarraren amorrua (La rabia de las lágrimas). Así, es inevitable percibir cierto poso de desazón en una colección de 11 canciones que el cuarteto bilbaíno grabó durante los pasados meses de septiembre y octubre en los estudios Elkarlanean de San Sebastián."En este disco hay un gran cambio en las letras, que son más profundas, están más curradas por todo lo que nos ha pasado este año. El estilo sigue siendo el mismo, hay canciones rápidas, alegres, con estribillos pegadizos, pero luego hay otras un poco más oscuras. Hay desde caña alegre hasta un poquitín de melancolía", comenta el guitarrista y cantante del conjunto, resumiendo el contenido de un álbum que se nutre fundamentalmente de heavy metal melódico, de clara ascendencia alemana, para desembocar en thrash metal en su cierre.

Aitor Abio (Pi L.T.) y Haritz Urrutia (Noraezean) han colaborado en la confección de un disco que sus autores califican de conceptual, igual que Arimaerratu, su antecesor. "Es también conceptual por lo que en realidad trata el disco, que se resume en su título. Va sobre las cosas que ocurren y no puedes hacer nada por evitar, como lo que pasó con Iñigo o los amigos que murieron en accidente. Entonces, hay un tema dedicado a Iñigo, están las Madres de la Plaza de Mayo, Pinochet, las minas antipersonales..."

Cuatro años después de su formación, con tres elepés y una maqueta en su haber, el objetivo de Idi Bihotz se concreta en romper barreras y llevar sus composiciones en euskera (vizcaíno y batua) fuera de Euskadi. Eso asegura un cantante que reconoce que los grupos de metal euskaldun, la mayoría a rueda de Su Ta Gar, por lo general se repiten constantemente. "Sí, todos cantamos sobre lo mismo", corrobora.

Otro disco recién llegado al mercado es la reedición de No soporto vuestras caras, el estreno discográfico de El Último Ke Zierre. El quinteto de Castellón se ha convertido en el más vendedor de cuantos forman el catálogo de la compañía vizcaína Hilargi Records y ésta ha decido rescatar, remasterizadas, todas sus primeras canciones. No soporto vuestras caras se grabó en 1991 y sólo fue editado en vinilo, por lo que hasta ahora era imposible adquirirlo fuera del mercado del coleccionismo. Contiene 12 temas que, con sonido austero, discurren por la senda del punk rock más básico, del rock urbano, del ska punk aprendido de Kortatu y del hardcore. Dichos estilos tejen la malla instrumental que soporta unos textos que denotan insatisfacción.