Prodi quiere que en las elecciones europeas de 2004 haya nuevos socios

Informe estratégico

El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, quiere que algunos de los países aspirantes a la adhesión participen en las próximas elecciones europarlamentarias de 2004, en sintonía con la tesis de los actuales eurodiputados. La propuesta exigirá como mínimo recortar en varios meses el proceso de ratificación por parte de los Parlamentos nacionales, que dura al menos un año y medio.Tanto Prodi como el comisario responsable de la Ampliación, el alemán Günter Verheugen, respaldaron el plan al presentar por la tarde ante la Comisión de Exteriores europarlamentaria los informes anuales sobre los 12 candidatos más Turquía, país con quien aún no se ha abierto la negociación ni se ha fijado fecha hasta que no haya más progresos en materia de derechos humanos y respeto a las minorías.

La Comisión reconoce que ha habido progresos desde que en diciembre de 1999 los Quince acordaron declarar aspirante al país euroasiático. Ankara acariciaba la idea de que las negociaciones comenzaran el año que viene. Sin embargo, Verheugen ha respondido con que la situación aún no está madura y ha planteado una lista de recomendaciones políticas, entre ellas la libertad de educación y cultura en alusión a la no reconocida minoría kurda, que representa al 15% de la población. El Gobierno turco insinuó el martes la posibilidad de dar más libertades a los kurdos.

El Colegio de comisarios aprobó por la mañana los diagnósticos, que dejan relativamente en buen lugar a la gran mayoría de candidatos si se exceptúa Rumania, Bulgaria y Turquía, así como un informe estratégico con un calendario concreto para la negociación de los capítulos más espinosos y los periodos de transición."Ha llegado el momento de dar un nuevo impulso", dijo Prodi, resuelto en los últimos tiempos a convertir como banderín de enganche de su hasta ahora poco lucida presidencia el ingreso de al menos alguno de los candidatos antes de que concluya su mandato, el 31 de diciembre de 2004. Polonia, Hungría, República Checa, Estonia y Malta podrían estar en el primer grupo de acceso.

El Ejecutivo comunitario elogia en público -ayer lo reiteró Prodi ante los legisladores- la actitud del Consejo de Ministros de respaldar "unánimemente" la ampliación, pero en privado critica a los Gobiernos por levantar el pie del acelerador.

Bruselas ha propuesto que en las próximas tres presidencias semestrales comunitarias (Suecia, Bélgica y España) se negocien, y teóricamente se trate de concluir, los capítulos aún no abiertos.

Le corresponderá al presidente José María Aznar, en el primer semestre del año 2002, dirigir la parte más espinosa de la negociación, todo lo que concierne a agricultura y a política de ayuda regional. El programa no ha sentado nada bien en Madrid ante el riesgo evidente de que las negociaciones se atasquen, confiesan fuentes diplomáticas españolas.