Enfriamiento
La economía española ha entrado en una fase de desaceleración que los analistas anunciaban desde hacía tiempo y que ayer confirmó el Banco de España. El PIB creció el 4% en el tercer trimestre debido al enfriamiento de la demanda y los mercados se preparan para recibir malas noticias sobre las previsiones de resultados empresariales.Por otra parte, el BCE volvió a intervenir en favor del euro y en contra de la tendencia del mercado de divisas, que volvió a ganarle la partida. Las bolsas de la zona euro acusaron la falta de credibilidad de su moneda y moderaron sus ganancias o pasaron directamente a las pérdidas, como fue el caso de París.
El BCE intervino con el euro a 0,8639 dólares, lo subió hasta 0,8728 y a última hora de la tarde había caído hasta 0,8570 dólares en medio de la indiferencia general.
El índice general de la Bolsa de Madrid subió el 0,52%, pero con un mercado muy volátil y con el negocio demasiado concentrado.
Entre Terra y Telefónica negociaron casi la mitad del conjunto del mercado, con la filial ocupando el primer lugar, a pesar de que su cotización fue perdiendo altura a medida que pasaba el tiempo. Terra arrancó con una subida del 5,6% para terminar la jornada con un descenso del 2,62%.
El mercado secundario de deuda, también muy inestable durante todo el día, ofrecía al cierre un repliegue de los precios y una discreta recuperación de la rentabilidad a 10 años hasta el 5,48%.
