El secuestrador del autobús griego se suicida

El ciudadano griego que se rindió el pasado sábado tras haber tomado durante todo el día como rehenes a 33 turistas japoneses en un autobús, se suicidó ayer por la mañana al saltar desde el séptimo piso de la Dirección de la Policía de Atenas, según informaron fuentes policiales. Cristos Kentiras, un mecánico de 48 años, consiguió escapar a la vigilancia de los policías que lo custodiaban, abrió una ventana y se arrojó al vacío. La violencia de la caída le produjo la muerte en el acto. En el momento de suicidarse, Kentiras se disponía a ser trasladado a la oficina del fiscal.

El ciudadano griego protagonizó ayer una odisea cuando, tras haber asesinado a su suegra y a su cuñado en la región de Galatas (en el este del Peloponeso), por diferencias de tipo familiar, quemó su coche en medio de una carretera, asaltó un autobús y tomó como rehenes a 35 pasajeros, de los cuales 33 eran japoneses. Tras unas once horas de persecución, que fue retransmitida en directo por la televisión griega, el secuestrador se rindió ante un conocido presentador de una cadena. Al parecer, una ruptura sentimental desencadenó el suceso.