Ocho jugadores, implicados en un fraude en las apuestas italianas

Un nuevo escándalo enfanga un poco al fútbol italiano. Al caso de los pasaportes falsificados, a la ola de racismo en la que se han visto involucrados clubes como Lazio y Roma, a la violencia en los estadios -que reapareció en las últimas semanas-, se ha sumado ahora el de un posible fraude en el que algunos futbolistas acordaron el resultado de un partido con el fin de sacar beneficio propio en los concursos de apuestas.Ocho jugadores, tres del Atalanta, recién ascendido a la Serie A, cinco del Pistoiese, de la Serie B, fueron oficialmente acusados por el fiscal federal italiano, Carlo Porceddu, de fraude en el ámbito deportivo. En la noche del pasado 20 de agosto, el Atalanta recibió al Pistoiese en la primera ronda de la Copa de Italia. El partido terminó 1-1, con un gol en el último minuto del primer tiempo para el Atalanta y empate, a tres minutos del final del Pistoiese.

Durante la mañana de ese 20 de agosto el órgano que gestiona las apuestas en Italia advirtió de una inusual cantidad de jugadas, en número y en dinero, para la combinación de ese partido, que en Italia juega con el resultado del primer tiempo y el resultado final. Denunciada la irregularidad, la policía interrogó al padre de un jugador del Pistoiese que se había hecho acreedor a un premio de 4.500 dólares (cerca de 900.000 pesetas) apostando a la jugada sospechosa, victoria del Atalanta en la primera mitad y empate al final. El padre reconoció que aquella apuesta se la había sugerido su hijo.

La sanción mínima para una falta de este tipo es de tres años de suspensión. Eso en el ámbito deportivo, por cuanto en la justicia ordinaria tanto ellos, como los parientes y amigos involucrados se arriesgan penas mucho más severas. Para los investigadores tanto el Atalanta como el Pistoiese no resultan comprometidos en la maniobra; para llegar a esta conclusión se basan en las escuchas que consiguieron hacer de las conversaciones telefónicas previas y posteriores a los hechos, las que sí incriminarían directamente a los ocho jugadores acusados, Banchelli, Doni y Seviglia del Atalanta, y Aglietti, Allegri, Amerini, Bizzarri y Lillo del Pistoiese.