Decenas de personas rinden tributo a Machado con la lectura de su obra

"Y cuando llegue el día del último viaje, / y esté al partir la nave que nunca ha de tornar, / me encontraréis a bordo ligero de equipaje, / casi desnudo, como los hijos de la mar". Los cuatro últimos versos del poema Retrato, de Antonio Machado, dejaron ayer un nudo en la garganta a decenas de personas. Sin embargo, el poeta sevillano está más vivo que nunca. Una lectura de sus poemas y prosas reunió ayer -entre las 10.00 y las 22.00- en el Centro Cultural El Monte, en Sevilla, a escritores, artistas, políticos y vecinos de la ciudad.

Esta lectura ininterrumpida sirvió de clausura al encuentro de homenaje La palabra en el tiempo, celebrado la pasada semana con motivo del 125º aniversario del nacimiento de Antonio Machado. Decenas de personas se acercaron a la Sala Juan de Mairena -una denominación que homenajea al célebre libro de Machado del mismo nombre- del Centro Cultural El Monte para recitar fragmentos de la obra del poeta sevillano.Profesores, empresarios, estudiantes, artistas, escritores y políticos pasaron por la sala para leer aquellos escritos de Machado que les conmovieron. Otras tantas personas formaron un público que recordaba con emoción o escuchaba por primera vez algunos de los fragmentos de la obra del poeta.

La lectura comenzó con la intervención del presidente de la Junta, Manuel Chaves, que escogió un fragmento de Juan de Mairena, la obra que resume en la prosa más cincelada la filosofía de Machado. El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, leyó el poema Recuerdo infantil, que dedicó a su padre. "Por las veces que me lo recitó y las veces que identifiqué a mi padre con Machado y a Machado con mi padre", dijo Monteseirín.

La consejera de Educación, Cándida Martínez, el escritor Juan Lamillar y el presidente del Parlamento andaluz, Javier Torres Vela, siguieron, entre otros, la estela del presidente andaluz y del alcalde de Sevilla.

"Tu verdad no, la verdad"

El concejal de Cultura, Juan Ortega, recordó dos de los poemas más hondos del escritor. "Tu verdad no, la verdad. Y ven conmigo a buscarla. La tuya guardátela". El edil sevillano también revivió a aquel jardinero de mares ignotos que se perdió, con su aire misterioso, en el alma de muchas personas. "Érase de un marinero que hizo un jardín junto al mar y se metió a jardinero. Estaba el jardín en flor y el marinero se fue por esos mares de Dios".Alfonso Guerra, diputado por Sevilla, hizo honor a su condición de devoto machadiano. Recitó con una entonación adecuada dos poemas que se sabía de memoria. Como si quisiera rubricar su saber, Guerra eligió dos poemas no muy conocidos: el que Machado dedicó a su amigo Palacio y el que glosa la figura de Giner de los Ríos ("Allí el maestro un día soñaba un nuevo florecer de España").

La lectura clausuró una semana en la que la ciudad recordó el aniversario de uno de sus hijos ("Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla, / y un huerto claro donde madura el limonero"). Poetas destacados, como Francisco Brines, Carlos Marzal, María Victoria Atencia, Álvaro Salvador o Ana Rossetti, han rendido su tributo a Machado. Escritores, como Félix Grande o Andrés Trapiello, y filósofos, como Emilio Lledó, también han aportado su voz a esa palabra en el tiempo tan machadiana que ha dado nombre al homenaje.