Medio Ambiente considera que los suelos que ocupó Electroquímica en Jódar están descontaminados

Electroquímica Andaluza completó la limpieza de las instalaciones de la fábrica situada en Jódar (Jaén) y descontaminó los suelos sobre los que trabajaron durante 20 años una plantilla de 70 personas, de las que han fallecido ya 14, según la asociación de ex trabajadores, por contacto con mercurio. La Delegación de Medio Ambiente de la Junta emitió un certificado, en febrero de este año y facilitado ayer por su responsable, Arturo Azorit, en el que se afirma que la descontaminación se realizó según los planes previstos.La empresa que realizó el informe final sobre los trabajos de limpieza del suelo fue Inerco, una entidad colaboradora de la Consejería de Medio Ambiente. En el texto aseguran: "El terreno no presenta contaminación".

Arturo Azorit resaltó ayer que no existen elementos que hagan pensar que hay otros lugares contaminados en las inmediaciones de Electroquímica. "Esta realidad no interfiere las consecuencias históricas de la contaminación existente anteriormente", añadió el responsable de Medio Ambiente.

Facundo Molina, secretario de la asociación de ex trabajadores, sí aseguró que durante los años de actividad de la fábrica se vertía el agua directamente al Guadalquivir. "Allí tiene que haber mercurio acumulado", dijo.

El delegado de Medio Ambiente en Jaén señaló que el cauce de los ríos no es competencia de la Junta, por lo que considera que es competencia de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir hacer las comprobaciones.

Una veintena de antiguos empleados lucha en los tribunales por conseguir que se les reconozcan sus enfermedades como profesionales, concretamente, como hidrargirismo. Para los trabajadores, esta descontaminación, realizada después de que cerrase la fábrica, evidencia que ellos desarrollaron su actividad en un lugar inseguro.

Los trabajos de limpieza han supuesto un coste de 250 millones de pesetas, sufragados por Uralita y Aragonesas, que adquirieron la fábrica al inicio de los años noventa. La descontaminación comenzó en febrero de 1999, siete años después del cierre de la industria. Los 25.000 metros cúbicos de tierra extraídos fueron enviados al vertedero al vertedero de Nerva (Huelva), según informó Azorít.