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Las series de estreno dominan la programación de Estados Unidos

En contra de lo que suele ser habitual, muchos de los estrenos de la nueva temporada televisiva en Estados Unidos están proporcionando excelentes resultados de público a las cadenas. Una treintena de series recién creadas comparten la parrilla con clásicos tipo Friends o Urgencias; esta vez, a diferencia de otras ocasiones, la mayoría de las nuevas producciones se defienden honrosamente en los índices de audiencia. En la época de la telerrealidad triunfan las grandes estrellas y la ciencia-ficción.

La cadena NBC tiene sus esperanzas en tres dramas: Ed, que gira en torno a un hombre que decide regresar a vivir a su pueblo natal y está producida por la compañía del presentador David Letterman; Deadline, una nueva serie sobre el mundo del periodismo -producida por Dick Wolf, el creador de Ley y orden-, y Titans, el nuevo culebrón de Aaron Spelling, en el que mezcla las mandíbulas perfectas de Melrose Place, el lujo rancio de Dinastía y los cuerpos danone de Los vigilantes de la playa.

Resultados prometedores

Las tres series han comenzado con resultados más que prometedores, aunque en su segunda semana de emisión las tres han bajado sustancialmente sus audiencias. En todo caso, la NBC puede seguir presumiendo de su superjueves con la garantía de Friends, Will & Grace y Urgencias. La telecomedia Will & Grace, una excelente serie del histórico James L. Brooks, ha desplazado en esa franja a Frasier, desterrado a los martes muy a disgusto de su actor protagonista.La cadena ABC continúa dependiendo del concurso ¿Quieres ser millonario?, que esta temporada aumenta a cuatro su número de ediciones semanales. Su gran apuesta, la telecomedia de la actriz Geena Davis (The Geena Davis show), ha sido maltratada por la crítica, pero ha logrado debutar con buenas expectativas. Llevan peor carrera sus otros dos envites de la nueva temporada, The trouble with Normal y Madigan men (protagonizada por el actor Gabriel Byrne).

La cadena CBS no gana para triunfos. Después de barrer en verano con el concurso Supervivientes, ahora comprueba el auténtico valor de ese programa: su público se ha rejuvenecido de manera asombrosa, y con ello hace que series veteranas como Raymond y Becker sean auténticas minas de oro en la venta de espacios publicitarios. También ha encontrado un éxito inesperado en la nueva serie policíaca CSI (en inglés, investigación en la escena del crimen) y, en menor medida, en el remake de El fugitivo.

Aun así, tal y como estaba cantado, la CBS obtiene su resultado más suculento con la telecomedia Bette, protagonizada por una de las estrellas más admiradas en Estados Unidos: Bette Midler.

En la Fox, que todavía no ha estrenado las nuevas entregas de Los Simpson y Expediente X, todavía se están asimilando las cifras espectaculares que deja Dark Angel, la serie de ciencia-ficción creada por James Titanic Cameron. Con sólo dos episodios emitidos hasta el momento, esta producción de costes astronómicos cuenta ya con la mejor publicidad: decenas de foros de adictos a través de Internet.

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