El festival recupera los clásicos de Troma

Como viene siendo habitual en los últimos años, la Mostra reserva una porción de su programación al cine más disparatado. Este año, como ya ocurriera hace nueve ediciones, rinde su particular homenaje a la productora norteamericana Troma con un ciclo bautizado como Parque Tromático. Nacida en 1974 por el empeño de dos nostálgicos del viejo cine de la serie B, Lloyd Kaufman y Michael Herz, la Troma se encaminó pronto hacia la producción de cine de terror y gore, así como a la orientación de sus productos hacia un público joven con comedias universitarias o cine de acción. Una hábil mezcla de humor, sexo y sangre convertiría a la productora en objeto de culto para la juventud de medio mundo a raíz de su película más famosa, El vengador tóxico, la historia de un joven tímido que adquiere poderes sobrenaturales al ser contaminado por unos residuos nucleares.Aunque este filme no figura entre los seleccionados por la Mostra, el festival promete un espléndido muestrario del catálogo de la productora, al recuperar algunas de sus películas, convertidas ya en clásicas, inéditas comercialmente en España. Es el caso de Def of temptation, de James Bond III, un inquietante filme de vampiros y sexo, Sargento Kabukiman, de los propios Lloyd Kaufman y Michael Herz, delirante cóctel a base de thriller y karate, o El monstruo del armario, de Bob Dahlin, una demostración de cine de serie B en toda su esencia a partir de un ser sobrenatural que habita en los armarios de las casas.

Cara al espectador más inquieto, la gran apuesta de este ciclo es una película incorporada a última hora. Se trata de Cannibal, The Musical, de Trey Parker, la opera prima de los creadores de la corrosiva serie televisiva South Park. La vida de Alfred Parker, un criminal de Colorado que ostenta el dudoso privilegio de haber sido el único hombre en América condenado a muerte por canibalismo, es transformada en una desopilante comedia musical que destila ironía en cada una de sus secuencias.