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El prófugo Marko

En el enorme salón de su mansión de Belgrado, los otrora leales partidarios de Milosevic se volvieron hacia él el viernes pasado. El general Pavkovic le pidió que asumiera la derrota. Al rechazarlo Milosevic, Pavkovic mandó entrar a varios oficiales del Ejército que (...), según una fuente militar yugoslava presente, desenfundaron sus armas. Milosevic se quedó mudo. (...)Su hijo Marko está actualmente en el limbo diplomático, tras serle denegado el estatuto de residente por Rusia y China. Ciertamente, el destino de Marko merece una mirada muy atenta, porque representa un enredo esencial en la gran tragedia de la propia Yugoslavia. Hace ocho años que Marko comenzó una cadena de negocios ilegales, tras salir del colegio, con el beneplácito de su madre, marxista-leninista. Se hizo rico (...) y notable en su ciudad natal, Pozarevac. (...) Se han reseñado muchas veces los paralelismos entre la familia de Milosevic y la de Ceaucescu. Sea el que sea su destino, ya está teniendo Marko su dosis de justicia poética. Se le está tratando como a muchos yugoslavos de a pie durante la última década. No tiene casa, sus pertenencias han sido robadas o destruidas, sus cuentas bancarias están congeladas y su posibilidad de viajar es limitada. No tiene refugio contra la ley. Ha llegado la hora de que tiemble de miedo y tenga que esperar. (...) La clase delincuente yugoslava, comenzando por Milosevic y Marko, debe ser puesta a disposición de la justicia. Puede que no se le juzgue en La Haya o por un tribunal internacional, pero sus delitos deben ser hechos públicos. (...)

, 11 de octubre

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