Alberdi declara que "el sistema de precandidaturas hubiera suavizado las discrepancias en la FSM"

"En la situación en que se encuentra la Federación Socialista Madrileña, el sistema de precandidaturas hubiera suavizado las divergencias, hubiera dado transparencia al debate y hubiera aumentado la participación de los militantes". Lo dice Cristina Alberdi, presidenta de la Federación Socialista Madrileña (FSM), después de que se hiciera público su intento de dimisión, en protesta por la decisión de la dirección federal del PSOE de no autorizar el sistema de precandidaturas a la secretaría general de la FSM.La dimisión de su cargo la enmarca en un largo proceso por intentar convencer a la dirección del PSOE "de la necesidad de aplicar en Madrid lo mismo que en la candidatura de Rodríguez Zapatero". "No ha sido una rabieta ni que de pronto haya perdido los papeles", afirma. "Desde el pasado mes de septiembre he venido luchando, con otros compañeros de ejecutiva, para que la dirección federal autorizara el mismo sistema que se utilizó en el PSOE. Decidimos incluso consultar por escrito a la federal. Cuando, el pasado sábado, contestaron diciendo que lo del 35º Congreso había sido una excepción vi que mi postura quedaba derrotada y presenté mi dimisión por pura coherencia".

Alberdi no se resiste a compararse con alguno de sus compañeros: "Siempre he ido con la cara por delante. Públicamente dije que, si queríamos transparencia y democracia, teníamos que aplicarlas en nuestro proceso". Y asegura que retiró su dimisión por "las cariñosas consideraciones" de los miembros de la ejecutiva y por el deseo de no hacer daño a la organización. "Tan respetuosa soy que guardé silencio sobre mi dimisión, tal y como se había acordado. Otros no lo hicieron".

Pero si algo le duele es que la federal del PSOE prohíba a la FSM las precandidaturas. "¿Por qué es bueno para unos y malo para otros? Yo me creí el espíritu del 35º Congreso, porque permitía la democracia, la transparencia y la participación. Lo triste es que el sábado, en el comité regional, la gente estuviera más interesada por las negociaciones entre las distintas familias que por el debate político. Yo respeto a cada una de esas familias. Pero no podemos llegar a estos extremos".