Kostunica se proclama presidente de una "Serbia liberada"
Vojislav Kostunica, el vencedor de las elecciones presidenciales del 24 de septiembre, se proclamó ayer presidente de Yugoslavia en el centro de Belgrado ante decenas de miles de enardecidos seguidores. "¡Buenas noches, Serbia liberada!", saludó a la muchedumbre. Las especulaciones sobre el paradero del hasta ayer presidente de Yugoslavia, Slobodan Milosevic, se sucedieron durante todo el día, y la oposición se contradijo al difundir distintas versiones. Mientras tanto, policía y Ejército aseguraron que no se enfrentarán a la población en la calle.
La muchedumbre escuchó a Kostunica, concentrada ante las gradas del Parlamento Federal, que todavía ardía, tras la toma por la tarde por parte de los manifestantes. El líder de la oposición apeló a la calma y la no violencia y convocó a una reunión de las dos cámaras del Parlamento Federal para la misma noche de ayer. "Buenas noches, Serbia liberada. Ahora Serbia da la vuelta de honor y en ese trayecto no está Slobodan Milosevic", clamó Kostunica. "Serbia está en el camino de la democracia, y donde hay democracia no hay sitio para Milosevic. Actuaremos de forma no violenta contra su violencia", anunció. Kostunica agradeció a la multitud: "¡Gracias Belgrado, Serbia, gracias por su confianza, gracias por haberse quedado conmigo hasta el fin! Ustedes se quedan conmigo y yo me quedo con ustedes".
Después de bañarse en loor de multitudes, Kostunica se marchó a la televisión estatal RTS para empezar a ejercer de presidente apuntando tres posibles primeros ministros del nuevo Gobierno yugoslavo. Kostunica dijo que el puesto sería confiado a algún dirigente del Partido Socialista Popular (SNP), principal fuerza opositora en Montenegro y hasta ahora aliada de Milosevic. No obstante, Kostunica, "el nuevo presidente de Yugoslavia", como le presentó RTS, dijo que el primer ministro sería alguien capaz "de comunicarse normalmente" con el Gobierno montenegrino que preside Milo Djukanovic, enemigo jurado de Milosevic y abanderado de la independencia respecto de Serbia.
Además, Kostunica precisó que su mandato presidencial sería "muy corto". "Las nuevas elecciones deberían celebrarse en un año y medio y todas las fuerzas políticas deberían participar", añadió. Después de esos comicios, se redactaría una nueva Constitución yugoslava, aseguró.
Kostunica aplacó las iras de los manifestantes y dijo que no arrestará a Milosevic. En la RTS reiteró, además, que no lo entregará al Tribunal Internacional de La Haya, que "es un instrumento de presión política" de EE UU, añadió.
El Partido Socialista de Serbia (SPS), el de Milosevic, declaraba su condena a las manifestaciones y a la rebelión del pueblo: "El SPS condena de la manera más enérgica la provocación de desórdenes y violencia, organizada por la así llamada Oposición Democrática de Serbia (DOS). El SPS, en todas las instituciones y con toda su fuerza, luchará contra la violencia y destrucción, luchará por una vida pacífica en nuestro país".
No parece probable que las declaraciones del SPS vayan a encontrar eco. Todo el aparato de agitación y propaganda del régimen se ha desmoronado. Los manifestantes asaltaron y tomaron la televisión oficial serbia (RTS), que dejó de emitir. Antes de la interviención de Kostunica, la RTS reapareció con un cartel que rezaba: "Ésta es la nueva RTS". La misma suerte corrieron otras emisoras privadas afines al régimen, como Pink, Palma y Studio B. Los periodistas de la agencia oficial yugoslava Tanjug se declararon de parte del pueblo. El corifeo de Milosevic, el diario Politika, adoptó una nueva línea editorial y en su edición de hoy proclama a Kostunica como "el nuevo presidente de Yugoslavia".
Privado de sus instrumentos de manipulación, Milosevic y su régimen se desmoronan. Sólo una intervención militar podría parar la isurrección. El ex jefe del Estado Mayor del Ejército, teniente general Momcilo Perisic, dirigente de la DOS, negoció con los mandos militares una solución pacífica de la situación y pidió que se abstengan de intervenir. "El Ejército yugoslavo no interferirá para nada en las calles", aseguraron fuentes del mando militar citadas por la agencia independiente Beta. El general de la policía Branco Djuric aseguró que los agentes sólo actuarán para evitar conductas criminales y proteger los edificios sede de las instituciones.
Pero, ¿dónde está Milosevic? Desde la afirmación, hecha por la tarde, de que un avión militar despegó con el presidente abordo (escoltado por otras dos naves), volaron otras versiones apadrinadas por dirigentes de la DOS: que está en el norte de Serbia, que ha salido del país con rumbo desconocido... Según la cadena de televisión ABC, los servicios de inteligencia estadounidenses "observaron muy atentamente" cómo Rumania daba ayer su autorización a unos aviones militares procedentes de Yugoslavia para penetrar en su espacio aéreo.
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