Los jueces cierran el cerco en torno al pago de comisiones de la francesa Elf para comprar Ertoil

La juez Teresa Palacios reanuda hoy los interrogatorios en la Audiencia Nacional para descubrir los pagos de comisiones por la venta de Ertoil en 1991. Javier de la Rosa, que gestionó la venta por Ercros, está citado hoy y su abogado, Juan José Folchi, declarará mañana. Mientras, el juez francés Renaud van Ruymbeke -que investiga el mismo asunto- va cerrando el cerco en torno a los receptores de comisiones ilegales por la venta de la petrolera española propiedad de Ercros a la francesa Elf. Las comisiones para hacerse con Ertoil ascenderían a unos 9.000 millones.

Los gestores de Ercros, liderados por Javier de la Rosa, vendieron Ertoil a Elf utilizando como mediadora a la firma luxemburguesa GMH, que acabó transfiriendo la petrolera a Elf, la cual finalmente no tuvo más remedio que adscribirla a su otra participada en España, Cepsa.El juez Renaud van Ruymbeke empezó con el iraquí Nadhmy Auchy, propietario de GMH y utilizado como tapado por Elf. Auchy cobró más de 6.875 millones de pesetas por su papel sin apenas riesgos. El multimillonario iraquí, entonces accionista principal de Paribas y amigo de Sadam Hussein, acabó siendo objeto de una orden de busca y captura del juez Ruymbeke el pasado 13 de julio.

La investigación se centró luego en el intermediario español Daniel de Busturia Jimeno, quien supuestamente recibió de Elf 985 millones de pesetas de comisiones. El juzgado sabe que De Busturia ingresó 11 millones de francos (275 millones de pesetas) en la cuenta que tenía en el Crédit Suisse el directivo de Elf Alain Guillon, quien precisamente le había contratado. De Busturia cobró a través de su sociedad Estrategias y sobre él pesa una reciente orden de busca y captura.

El tercer descubrimiento del juez francés ha sido la sociedad Microtech Financial Corporation, radicada en Luxemburgo, que recibió 1.000 millones de pesetas por esta operación, según los informes de la policía judicial francesa. La titularidad de esta sociedad es una incógnita por ahora. Javier de la Rosa, entonces hombre fuerte de Torras-KIO -dueño de Ertoil-, dirigía las operaciones de venta de Ertoil junto con los directivos de Ercros, entre los cuales se mostró "muy activo", según la Fiscalía de la Audiencia Nacional, Josep Piqué, actual ministro de Asuntos Exteriores español, a la sazón director de estrategia corporativa de Ercros.

Según una nota escrita a mano y encontrada en el registro de la sede de Elf que la policía francesa realizó el 19 de julio de 1995, los 1.000 millones de pesetas de Microtech "podrían ser una contrapartida por los servicios de De la Rosa, quizá el verdadero destinatario de la comisión". De la Rosa asegura que no tiene nada que ver con esa sociedad y sobre la venta de Ertoil afirma: "Está limpia de comisiones, al menos por nuestra parte".

Auchy se adjudicó el 10 de enero de 1991 los 3.279 millones de pesetas de la opción de compra cedida a Elf. Más tarde -con la operación cerrada- su empresa GMH Panafrican (PAN) recibía otros 3.600 millones, hasta completar los 6.879 millones por su intervención en la operación. Por entonces, Loïk le Floch-Prigent era el presidente de Elf-Aquitaine.

Hubert le Blanc-Bellevaux, fontanero de la ex empresa pública Elf, ha declarado: "Fui yo quien tuvo la idea de ir a buscar a GMH, aunque no tenía ningún poder para imponerla a Elf. GMH, una sociedad conocida en los medios económicos, era, entre otros, principal accionista privado de Paribas".

En sus declaraciones ante la justicia, los ejecutivos de Elf no se ponen de acuerdo. Lo que para Le Blanc-Bellevaux fue pagar una "opción de compra" a GMH Panafrican por parte de Elf, para Alain Guillon, director del departamento de refino y distribución de Elf, son "comisiones pagadas". André Tarallo, alto ejecutivo de Elf, destapó el tarro de las esencias: "Fueron comisiones ilegales".

Llamada del Elíseo

A Le Blanc-Bellevaux le gustaba presumir de tener hilo directo con la presidencia de la República francesa, como si fuera un eslabón importante de la política subterránea del Elíseo, financiada a menudo a través de Elf, como revelan las pruebas de los sumarios que instruyen los jueces Eva Joly y Renaud van Ruymbeke, que manejan un caso de más de 36.000 folios. El 31 de diciembre de 1990 los negociadores de Elf habían llegado a un acuerdo con Javier de la Rosa sobre el precio para comprar Ertoil. Los franceses impusieron a última hora a GMH, y cuando los españoles descubrieron que era una sociedad propiedad del iraquí Auchy, se asustaron. Ellos tenían órdenes de vender activos porque los kuwaitíes -dueños de Torras-KIO y por tanto de Ertoil- buscaban financiación para la campaña militar con la que pretendían expulsar de su país a los invasores iraquíes. Así se lo hicieron saber a los franceses, como quien pide que cambien la fórmula de la compra.

A las ocho de la tarde del 31 de diciembre de 1990, el principal negociador de la compra por parte española se encontraba en un hotelito de la estación de esquí de Val d'Isère, en los Alpes franceses, cuando un azorado botones subió a su habitación: "Tienen una llamada del Elíseo".

El negociador de Ercros expuso la inconveniencia de usar un testaferro iraquí y, al final, Le Blanc le espetó: "Mire, si sigue usted poniendo problemas, no saldrá de Francia". Pero el 9 de enero de 1991 Auchy se convertía en el propietario de Ertoil.